| Telemadrid
(Actualizado

Cerca de 18.000 gazatíes, de acuerdo con datos de la UNRWA, abandonaron hoy su hogar, impulsados por el terror que ha desatado en las poblaciones del norte y el sur la presencia en Gaza de la infantería y los carros de combate israelíes. Las unidades terrestres del Ejército israelí cruzaron anoche la frontera entre Gaza e Israel en medio de intensos bombardeos de cobertura de la aviación y la marina después de que el Ejecutivo que dirige el primer ministro, Benjamin Netanyahu, escuchara la voz de los más extremos y autorizara la segunda incursión terrestre en la franja en cinco años.

Los tanques bombardearon con intensidad localidades del sur y el norte de Gaza, donde también se entablaron combates cuerpo a cuerpo en los que murieron 14 milicianos y un soldado israelí, según datos de la portavocía castrense.

La consecuencia fue una larga noche de terror que esta mañana incrementó el miedo y colocó a la franja al borde de un nuevo pico de incremento en su perpetua crisis humanitaria.

En un comunicado enviado a los medios, Chris Gunness, portavoz de la UNRWA para la zona, corrigió sus primeras estimaciones y cifró, poco antes de anochecer, en 18.000 las personas que este viernes recogieron la poca comida que les queda en casa, hicieron un hatillo de ropa y buscaron refugio con el colchón al hombro.

La gran mayoría con uno de los pocos destinos posibles en mente: las escuelas gestionadas por la UNRWA, que ya se encuentra al borde de la capacidad establecida en el plan de contingencia, que cifraba loa posibles desplazados en 50.000.

"La cifra de personas que han buscado refugio en la UNRWA desde el inicio de la ofensiva se ha doblado hoy, de las 22.000 que había hasta cerca de 40.000. Los estamos acomodando en 34 centros de la agencia", afirmó Gunness.

Funcionarios de la UNRWA en Gaza explicaron esta semana que la capacidad de la agencia es de 50.000, pero solo si se trata de un conflicto corto

Para poner el primer parche, la agencia "ha lanzado un petición de ayuda a los donantes de 60 millones de dólares para trabajos de emergencia".

"Esto sería suficiente para cubrir las provisiones de los desplazados el mes siguiente y reponer las partidas de emergencia para los seis meses venideros", explicó Gunness, quien volvió a exigir a las partes que respeten el derecho humanitario internacional.

El Ejército israelí emprendió anoche una incursión terrestre en Gaza, que como primera consecuencia tuvo un recrudecimiento de los bombardeos en el norte y el sur de la franja, en particular en los barrios septentrionales de Beit Lahia y Beit Janun.

Días antes, y en medio de intensos bombardeos aéreos, Israel avisó a la población de ambas barriadas, calculadas en unas 100.000 personas, que abandonaran sus casas lo que causó un primer flujo de desplazados.

A parte de las escuelas de la UNRWA, los gazatíes no tienen otro lugar para huir, ya que Israel impone un asedio militar por tierra y mar sobre la franja, y Egipto mantiene cerrado el paso de Rafah, que comunica Gaza con el resto del mundo.

"Queríamos quedarnos en nuestra casa. No tener que vivir de prestado. Pero ayer fue horrible. las bombas no dejaban de caer y los niños no podían dormir", explicaba esta mañana a Efe Umm Salah, una mujer de 32 años procedente del barrio de Zaitum

"Aquí los niños duermen. No mucho, pero duermen. No hay nada seguro en Gaza, pero aquí nos sentimos mejor", agregaba a su lado Lamia, su hermana.

En torno, cientos de chiquillos, la mayor parte de ellos sucios y desarrapados, retozaba en el suelo con la mirada triste y el sueño pegado a sus pestañas.

Según datos de la propia UNRWA, más de la mitad de los cerca de dos millones de personas que viven en Gaza son niños o menores de edad.

Afectados en su desarrollo psicológico por el conflicto y el asedio, son ahora también una de las principales víctimas mortales: alrededor de medio centenar de ellos han perdido la vida en once días de ataques.

En el plano bélico, Israel aseguró haber arrestado hoy a trece palestinos a los que buscaba por pertenecer al brazo armado de Hamás y dijo haber destruido una veintena de lanzaderas de cohetes y más de una decena de túneles, que asegura son su principal objetivo.

Las milicias, por su parte, han proseguido con su lanzamiento de cohetes contra Israel, en menor medida, y sin causar víctimas.

Netanyahu, que hoy volvió a hablar con el presidente de EEUU, Barak Obama, y otros líderes mundiales, insistió de nuevo en que el Ejército dispone del tiempo que sea necesario y que se adentrará en Gaza todo lo que estime oportuno.