La revista Charlie Hebdo | EFE
(Actualizado

El proceso que desde septiembre juzgó a quienes ayudaron a cometer los atentados de enero de 2015 en París, en los que murieron 17 personas, 12 de ellas en el ataque contra la revista Charlie Hebdo, concluyó este miércoles con condenas que oscilaron desde los cuatro años a la cadena perpetua.

En el banquillo del Tribunal Penal Especial se habían sentado 11 de los 14 acusados de haber aportado ayuda logística, financiera o material a los hermanos Saïd y Chérif Kouachi, responsables del atentado contra el semanario, y a Amedy Coulibaly, que asesinó a una agente policial y luego a cuatro personas en un supermercado judío.

Esos ataques entre el 7 y el 9 de enero fueron los primeros de una oleada de atentados yihadistas en suelo francés que desde entonces ha matado a más de 250 personas, y su juicio, considerado histórico desde su inicio, se centró en sus colaboradores porque los tres autores materiales fueron abatidos por la policía.

La pena más dura, una condena a perpetuidad, fue pronunciada contra Mohamed Belhoucine, uno de los tres acusados que estaban en busca y captura, del que las autoridades creen que murió combatiendo en Siria y considerado el mentor de Coulibaly.

La viuda de este último terrorista, Hayat Boumeddiene, de la que también se cree que se fugó a Siria, recibió una pena de 30 años.

La otra sentencia de 30 años fue para Ali Riza Polat, el único cómplice directo de los tres atacantes y también el principal condenado presente en la sala.

La Fiscalía Nacional Antiterrorista francesa había solicitado condenas de 5 a 20 años para el resto de implicados y la corte no se ajustó a esa petición al considerar que la participación de seis de los acusados presentes en una asociación criminal de malhechores no tenía fines terroristas.