Al menos 26 personas, entre ellos nueve policías, han muerto en las últimas 24 horas en los violentos disturbios que continúan en Kiev, según los datos actualizados por los Ministerios de Interior y Sanidad de Ucrania.
"Han muerto 25 personas: ocho tras ser hospitalizados en clínicas municipales, cuatro en el hospital del Ministerio de Interior y otros 13 fueron traídos al servicios clínico forense de Kiev", señalaba el último comunicado de la cartera de Sanidad, dado de madrugada. Al mediodía de este miércoles la cifra alcanza las 26 víctimas.
El Ministerio de Interior, a su vez, cifra sus heridos en 349 agentes hospitalizados, 74 de ellos con heridas de bala. Los enfrentamientos entre manifestantes y antidisturbios continuaron durante toda la noche, con la plaza de la Independencia (conocida como el Maidán) cercada por la policía, y varias personas más habrían muerto durante la madrugada, según informaciones no confirmadas por fuentes oficiales.
Algunos cadáveres habrían sido llevados al monasterio Mijáilovski, próximo a la plaza de la Independencia, corazón de las multitudinarias protestas populares que empezaron hace tres meses contra el presidente ucraniano, Víktor Yanukóvich, tras su negativa a firmar el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea.
Al menos 114 personas han sido hospitalizadas, según el ministerio de Sanidad, mientras que otras fuentes calculan que el número total de heridos en los disturbios se cuenta por centenares.
La sociedad médica Medichna Varta (Guardia médica) informó de la muerte por herida de bala del periodista Viacheslav Vereméi, redactor del periódico local Vesti, atacado esta madrugada por un grupo de radicales cuando volvía en taxi del trabajo junto a otro colega. Vereméi falleció en la ambulancia, mientas que su compañero ingresó en el hospital con diversos traumatismos.
Miles de manifestantes resisten a esta hora en el Maidán el asalto de las fuerzas antidisturbios "Berkut" y las tropas del ministerio de Interior, que empezaron anoche el desalojo forzoso del bastión de la oposición. Arden las barricadas y algunas tiendas de campaña en una pared de fuego que ha separado durante toda la noche a policía y manifestantes.
Los opositores alimentan el fuego con neumáticos y resisten el embate de las fuerzas de seguridad con lanzamiento de piedras, petardos, cócteles molotov y fuegos artificiales, mientras la policía responde con granadas aturdidoras e intenta apagar el fuego con camiones lanzaagua.
Los antidisturbios avanzaron desde la última hora de ayer en dos direcciones hacia la plaza y dejaron despejados otras dos para permitir a los manifestantes abandonar la plaza.
La violencia en el centro de Kiev, con decenas de heridos de bala en ambos bandos, se desató ayer por la mañana durante la marcha de miles de manifestantes hacia la Rada Suprema (Parlamento ucraniano), justo después de que entrara en vigor la amnistía de todos los detenidos en las protestas de los últimos tres meses.
Los enfrentamientos empezaron cuando la policía intentó impedir el paso de una multitudinaria marcha opositora para demandar la restitución de la Constitución de 2004, que limitaría los poderes del presidente, estallaron los enfrentamientos.
YANUKÓVICH: "LOS LÍDERES DE LA OPOSICIÓN RESPONDERÁN ANTE LOS TRIBUNALES"
El presidente de Ucrania, Víktor Yanukóvich, advirtió que los líderes de la oposición responderán ante los tribunales por llamar a los manifestantes a tomar las armas y enfrentarse a las fuerzas del orden. "Han cruzado los límites cuando llamaron a la gente a las armas. Y eso es una clamorosa violación de la ley.
Y los criminales deben comparecer ante la Justicia, que determinará su castigo. No es un capricho mío, es mi obligación como garante de la Constitución", dijo el líder ucraniano tras reunirse en la madrugada con los líderes de la oposición parlamentaria.
Yannukóvich exigió a los dirigentes de los tres partidos opositores, al frente de las multitudinarias protestas populares que vive Ucrania desde hace tres meses, que renieguen inmediatamente de los radicales que provocaron los sanguinarios disturbios que continúan hoy en el centro de Kiev, con al menos 21 muertos en las últimas
REUNIÓN DE MINISTROS DE ASUNTOS EXTERIORES DE LA UNIÓN EUROPEA
Los ministros de Asuntos Exteriores de Francia, Alemania y Polonia viajarán a Kiev este jueves para conocer de primera mano la situación que vive Ucrania. "Sin demora, he decidido con mis homólogos polaco y alemán viajar mañana por la mañana a Kiev para recoger las primeras informaciones antes de la reunión de Bruselas de la tarde", dijo el ministro francés de Exteriores, Laurent Fabius, tras el consejo franco-alemán que tuvo lugar hoy en París.
Fabius, que irá acompañado de sus homólogos alemán, Frank-Walter Steinmeier, y polaco, Radoslaw Sikorski, agregó que "todo el mundo tiene que movilizarse pacíficamente para recuperar el diálogo y favorecer una solución" en Ucrania.
Tras su viaje relámpago a Kiev, los tres ministros asistirán por la tarde en Bruselas a la reunión de titulares de Exteriores de la UE convocada por la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, para estudiar eventuales sanciones al gobierno de Víktor Yanukóvich.
"Los responsables de esto no pueden quedar impunes", declaró Fabius tras reunirse en París con su homólogo estadounidense John Kerry.
El jefe de la diplomacia francesa precisó que esas sanciones deben ser "individuales" y dirigidas a personas concretas.
Kerry también expresó su deseo de que se calme la situación en el país.
Francia y Alemania pidieron sanciones contra los responsables de la represión en Ucrania, tras el consejo de ministros bilateral que presidieron en París el presidente francés, François Hollande, y la canciller alemana, Angela Merkel.
"Los que han cometido esos actos, los que se preparan para cometer otros, deben saber que serán sancionados", declaró Hollande, que calificó de "intolerables e inadmisibles" los actos violentos.
En el mismo sentido se pronunció Merkel, que consideró que "las sanciones no son suficientes" por lo que "hay que relanzar un proceso político" y multiplicar los contactos, "principalmente en la dirección de Rusia".
El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, tuvo este miércoles una conversación telefónica con el presidente de Ucrania, Víctor Yanukóvich, en la que le confirmó la disposición de la UE a ayudar al país y le avisó de que actuará con firmeza ante el deterioro de la situación.
Según un comunicado de la Comisión, en su conversación con Yanukóvich, Barroso expresó al líder ucraniano su "conmoción y consternación" por los recientes enfrentamientos en Ucrania que han provocado la muerte o heridas a numerosas personas. Pidió el "fin inmediato de la violencia" y condenó "firmemente" el uso de la fuerza para resolver la crisis política. En ese contexto, recordó que el Gobierno ucraniano tiene una "responsabilidad especial" a la hora de "evitar la violencia y respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales".
El Gobierno de España ha condenado este miércoles el uso "brutal y desproporcionado" de la violencia y ha hecho un llamamiento a "autoridades, oposición política y manifestantes" a la "contención" y a que se abstengan de emprender medidas que puedan agrandar la actual brecha existente entre ellos.