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La policía griega envió hoy refuerzos a la isla griega de Kos para hacer frente a la crisis migratoria que acabó ayer en enfrentamientos entre los agentes y un grupo de indocumentados, que esperaban su turno para registrarse y obtener los documentos de viaje. Concretamente, se trata de doce oficiales de las fuerzas policiales especializadas en materia migratoria, incluido un hablante de árabe, que viajaron a la isla griega con el objetivo de acelerar el procedimiento de identificación de los alrededor de 7.000 inmigrantes y refugiados que esperan recibir su documentación.

Además, 250 agentes se han trasladado a Kos y a otras islas del este del mar

Egeo, como Lesbos y Samos, después de que ayer algunas peleas entre los cientos de inmigrantes y refugiados que esperaban para registrarse provocaran que la policía les golpease con porras y les rociase con extintores para tratar de disolver las contiendas.

Durante la larga espera, en un estadio de fútbol habilitado para proporcionar papeles a los recién llegados, algunas personas se desmayaron por la aglomeración y las altas temperaturas y otras gritaron en protesta contra la falta de comida, las malas condiciones higiénicas y de alojamiento y la dificultad para obtener los documentos que les permitan salir del país.

En las últimas semanas un gran número de indocumentados han llegado a las turísticas islas del mar Egeo, donde acampan a la espera de poder llegar a Grecia continental y continuar su viaje hasta el centro de Europa.

Según datos presentados la semana pasada por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), en los primeros siete meses de 2015 han desembarcado en Grecia 124.000 refugiados e indocumentados, principalmente en las islas de Kos, Lesbos, Jíos, Samos y Leros, cercanas a las costas de Turquía.

Solo en julio pasado llegaron a Grecia 50.000 personas de Siria, Afganistán, Irak, Eritrea y otros países, más de los que entraron en todo el año pasado, y un incremento de 20.000 con respecto a junio.

Este aumento ha hecho que los desembarcos en el país se hayan incrementado un 750 por ciento entre el 1 de enero y el pasado 31 de julio, con respecto al mismo periodo del año pasado.

La viceministra de Inmigración, Tasia Jristodulopulu, ha anunciado que para finales de 2015 el Gobierno tiene previsto la creación de 2.500 plazas para alojar a indocumentados, pues un gran grupo se instalan en campamentos improvisados en Atenas, donde no disponen de las condiciones básicas de habitabilidad.

Para alojar a estas personas el Ejecutivo construye un centro de alojamiento temporal cerca del centro de la capital, que espera que esté operativo en los próximos días.