En Estados Unidos en el estado de Arizona una enorme tormenta de arena ha cubierto por completo toda la ciudad de Fenix y otras tres ciudades cercanas.
Los servicios de emergencia han advertido a la población de evitar en lo posible circular por las calles. El fenomeno es habitual en zonas deserticas.
La barrera de arena que envolvió algunas partes de la ciudad también afectó al tráfico, dado que los conductores bajaron la velocidad al perder visibilidad.
Los fuertes vientos, que en ocasiones alcanzaron las 50 millas por hora (unos 80 kilómetros por hora), derribaron árboles y postes eléctricos.