Los yihadistas detenidos en Bélgica tenían intención de atentar contra la sede de la Comisión Europea en Bruselas, según ha informado la cadena pública de televisión holandesa NOS citando fuentes judiciales.
Los sospechosos, un hombre y una mujer de origen turco, fueron detenidos a principios de agosto a su llegada al aeropuerto de Bruselas cuando regresaban de Turquía, pero probablemente habían pasado antes por Siria. Ambos sospechosos habrían incurrido, según estas fuentes, en un delito de pertenencia a un grupo terroristas, de incumplir la legislación sobre armas y de financiación de un grupo terrorista.
Los dos detenidos residían en La Haya, pero visitaban Bruselas con frecuencia, y las autoridades estarían buscando a otros sospechosos, especialmente a un holandés de origen turco vinculado con las redes yihadistas.
Durante el registro del apartamento de los detenidos han sido halladas armas de fuego, un chaleco antibalas y materiales yihadistas, informa el periódico belga 'La Dernire Heure' en su edición digital.
Los sospechosos siguen encarcelados tras una operación de la que las autoridades han dado muy pocos detalles para no alarmar a la población. Solo se sabe que estos ataques iban a ser "comparables en escala al perpetrado en el Museo Judío de Bruselas por Mehdi Nemmouche", el joven francoargelino que mató a cuatro personas el pasado mes de mayo.
Las fuerzas de seguridad siguen de cerca a los 90 belgas que según sus fuentes han participado en el conflicto sirio y han regresado a Bélgica. Algunos de ellos, han apuntado, tienen la intención de llevar a cabo un ataque.
"No vamos a dar ninguna otra información", ha apuntado el fiscal Jean Pascal Thoreau al diario belga 'Le Soir'. "Estamos trabajando con los servicios de seguridad y hemos realizado diferentes operaciones y ejecutado varias órdenes de arresto, pero no vamos a dar información sobre los datos de los interesados o el contexto de los registros".