La portavoz del PP en el Ayuntamiento de Madrid, Esperanza Aguirre, ha pedido la dimisión de la concejal delegada de Cultura y Deportes, Celia Mayer, por los errores "incitadores al odio".
Errores que figuran en el trabajo sobre el cambio de nombre de calles franquistas llevado a cabo por la historiadora de la Universidad Complutense Mirta Nuñez. La oposición popular denunció errores de bulto en ese informe.
CONTRATADO POR UN EURO MENOS PARA SALVAR LA LEY
La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena encargó el informe sobre las calles franquistas a la historiadora Mirta Núñez, hija de la primera mujer de Fidel Castro. Como esas decisiones se toman en Pleno a partir de 18.000 euros, Carmena se lo encargó por 17.999, sólo un euro menos, y así se garantizaba que lo hiciera quien ella quería.
En una rueda de prensa posterior a una reunión del grupo municipal del PP, Aguirre ha dicho que la propia Nuñez, hijastra de Fidel Castro, debería dimitir o ser cesada de su cargo en la Complutense por los "errores de bulto" cometidos en el trabajo que lleva a cabo por encargo del Ayuntamiento de Madrid.
Además, el PP ha criticado el hecho de que el Ayuntamiento haya contratado a Nuñez para este trabajo por 17.999 euros, para evitar por sólo un euro la obligación de sacar el contrato a concurso entre tres ofertas distintas.
ERRORES DE BULTO QUE INCITAN AL ODIO
En diciembre pasado, el Ayuntamiento aprobó cambiar el nombre de treinta calles dedicadas hasta ahora a personas vinculadas con el franquismo, para cumplir con la Ley de Memoria Histórica.
Según el PP, para retirar el nombre de Francisco Iglesias de una calle de Vallecas el informe incluye una foto de una matanza de Stalin en Polonia y para retirar el nombre de la calle General Orgaz explica los motivos con una imagen de un campo de concentración nazi en Noruega.
Para Aguirre, sacar estas fotografías como si correspondiesen a sucesos acaecidos en España demuestran una "intención malvada" y un intento por "acabar con el espíritu de la transición y de enfrentar a unos con otros".
La portavoz del PP ha afirmado que tales errores son "incitadores al odio y no pueden ser propios de una concejal del Ayuntamiento de Madrid" y ha añadido que "no tiene sentido" utilizar el dinero público para unos fines que terminan siendo errores.
"No queremos frenar el cumplimiento de la ley (de la Memoria Histórica) que está para recordar a las víctimas de los dos bandos", ha dicho Aguirre.
Según el PP, el Ayuntamiento argumenta para cambiar el nombre de la calle del Comandante Zorita que "había bombardeado Guernica" cuando "la realidad es -dice- que aprendió a pilotar seis meses después" de dicho bombardeo.
El grupo popular es contrario también a la retirada del nombre de la calle Batalla de Belchite, pues murieron combatientes "de ambos bandos" y la permanencia del nombre "puede ser motivo de recuerdo de todos los que combatieron".