Restaurante Ancestral, apuesta liderada por Víctor Infante y Saúl González que surgió hace cuatro años en Illescas y que luce Estrella Michelin desde hace dos, ultima su mudanza a Pozuelo de Alarcón, lo que le llevará a dar un último pase este domingo 30 en el local de la ciudad toledana que le vio nacer antes de asaltar la capital de España con un nuevo proyecto sobrado de ambición pero en el que pretenden apuntalar el concepto que les ha llevado al éxito.
A pocos días de su último servicio, los impulsores de Ancestral han atendido a Europa Press para asegurar que el diseño del nuevo restaurante será muy parecido al actual, pero con mucho más espacio y avanzando en modernidad."Vamos a hacer un Ancestral 2.0, con más comodidad, más distancia entre mesas y más confort para el cliente", explica Saúl González, quien añade que la nueva propuesta viene además de la mano de una amplia zona exterior.
Con la vista puesta en abrir puertas a más tardar en la primera semana de mayo, González avanza que el hecho de que la nueva cocina multiplicará por cuatro el espacio de la actual permitirá "hacer cosas con un poco más de nivel y definición", lo cual hace vaticinar que conservarán la meritoria Estrella otorgada por la guía de los neumáticos con la ambición de revalidarla en el próximo reparto de 2026.
El encargado de los fogones, de su lado, argumenta que se trata de un traslado "necesario" por el crecimiento que ha experimentado el proyecto desde la cocina illescana, algo que también achaca al equipo, "que tiene ganas de crecer y de acceder a más técnicas y más espacio", un desarrollo que lo harán ahora más cerca de la exigencia de la clientela de Madrid.