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El titular del Juzgado de Instrucción número 51 de Madrid, Eduardo López-Palop, que investiga el caso Madrid Arena, prevé levantar la imputación del exdelegado de Seguridad del Ayuntamiento de Madrid Antonio de Guindos en esta causa, según fuentes de la investigación.

López-Palop tiene previsto reducir el número de imputados en el procedimiento, que en la actualidad se eleva veinticuatro personas pertenecientes a Diviertt -los promotores de la fiesta-, Kontrol 34, Seguriber, Madrid Espacios y Congresos -la empresa municipal gestora del Madrid Arena-, el equipo encargado de la asistencia médica en el evento y la cúpula de Seguridad, Policía Municipal y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid.

Las mismas fuentes del Juzgado han precisado que algunas de las personas que han prestado declaración como imputadas en el procedimiento van a ir como testigos al juicio.

El juez, que tomará declaración a una decena de testigos este mes, está pendiente de recibir un informe de la clínica médico-forense sobre la actuación de los encargados de la asistencia sanitaria en el Madrid Arena, Simón y Carlos Viñals, solicitado por la Fiscalía.

También debe resolver un recurso de nulidad presentado por Diviertt sobre la cadena de custodia de las entradas al recinto antes de dictar el auto de transformación de las diligencias previas en procedimiento abreviado.

EMPLEADOS DE SEGURIBER

Los empleados de Seguriber Ángel Álvarez y David de Ozaeta han prestado declaración como testigos ante el juez del caso Madrid Arena en la fase final de la investigación sobre las circunstancias de la muerte de cinco chicas en la fiesta de Halloween del Madrid Arena del 1 de noviembre de 2012.

Los dos trabajadores de Seguriber, que estaban asignados al túnel de cristal y el portón de cafetería en la planta intermedia del recinto, han asegurado que no vieron ni escucharon nada de lo ocurrido en la pista central la noche de los hechos.

Durante su declaración, Álvarez, que estaba destinado en el túnel de cristal, ha puesto de manifiesto que no conocía el Madrid Arena, ni los planes de autoprotección, de seguridad y de vigilancia del pabellón y ni había recibido instrucciones, según los abogados de las familias de las víctimas.

Álvarez ha reconocido que abrió la puerta para que alguien sacara a una chica inconsciente en brazos, al ver que era una "urgencia", aunque no recordaba la salida de otra víctima por esa puerta, que fue grabada por las cámaras de seguridad del recinto.

Estos dos testimonios, solicitados por las acusaciones particulares, permiten completar la participación de Seguriber en los hechos. Los abogados de las familias de las víctimas han anunciado que mañana pedirán el cambio de la condición de un empleado de Seguriber de testigo a imputado.