El Black Friday para el pequeño comercio de Madrid: “Fue un invento de los grandes”
Hablamos con Armando Rodríguez, presidente de la Confederación de Comercio Especializado de Madrid (Cocem), quien nos cuenta cómo afronta el sector la campaña
El próximo viernes comparecerá ante la Asamblea de Madrid para informar sobre la situación y necesidades del comercio madrileño
C.M.T.
Llega un nuevo Black Friday y ya sin la restricciones provocadas por la pandemia. Con la crisis de suministros en el horizonte se espera que muchos aprovechen para adelantar las compras de Navidad.
Sin embargo, el pequeño comercio no lo ve con mucho optimismo: “La situación es tan complicada que yo creo que el comercio de proximidad en general va a ser muy reacio a participar de una manera activa”, dice Armando Rodríguez,Presidente de la Confederación de Comercio Especializado de Madrid (Cocem) en declaraciones a Telemadrid.es. “El Black Friday no viene bien, en general”, afirma.
Muchos comerciantes empiezan ya a sentir el problema provocado por la crisis de suministros: “En algunos sectores hay problemas, sobre todo en aquellos que tienen que trabajar con temporadas, como el de la ropa que trabaja con meses de antelación”, explica Armando Rodríguez. "La ropa de verano próximo debería empezar a llegar a las tiendas en enero o febrero, pero con esta situación, explica, “hay miedo a que la temporada del verano del año que viene no llegue”.
Ante semejante situación, los comerciantes no están demasiado interesados en participar en el Black Friday: “depende del sector, pero ¿Qué necesidad tiene el comercio de, ante una crisis de abastecimiento, hacer una liquidación de productos? Yo creo que cualquiera preferiría tener mercancía en las tiendas ante un problema de estocaje que pueda venir”, explica Armando Rodríguez.
Para Armando Rodríguez “el Black Friday fue un invento de los grandes”, pero la situación del comercio de proximidad es diferente: “ellos no tienen un almacén lleno de productos”.
El Black Friday, “va en beneficio de las grandes cadenas, que tienen fabricación propia, pero todo el que depende de fabricación ajena y de distancia, tiene un problema grave”, insiste el presidente de Cocem, “ellos hacen descuentos todo el año, y arrastran a los demás", pero, el pequeño comercio, explica, “no puede estar de rebajas ni haciendo campañas todo el año porque los márgenes comerciales de muchos sectores son ajustados”.
Pandemia, desabastecimiento, escasez de suministros, problemas de transporte, … En este contexto, sumarse al Black Friday es difícil para el comercio de proximidad: “Es complicado porque vivimos el momento que estamos viviendo, no se puede basar la política comercial en descuentos”.
Y a todo eso hay que añadir, explica Armando Rodríguez, la subida del precio de la luz y el coste de la energía, que ya ha reducido los márgenes de beneficios de los comerciantes. Reducir aún más el margen por el Black Friday “no creo que interese a los pequeños comercios” .
El próximo viernes, 19 de noviembre, Armando Rodríguez comparecerá ante la Comisión de Economía y Empleo de la Asamblea de Madrid para informar sobre la situación y las necesidades del comercio madrileño y del impacto de la pandemia en el sector.
Ese día, cuenta a Telemadrid.es, expondrá a los diputados la difícil situación que vive el sector, una situación que la pandemia ha complicado pero que ya era estructural antes de la llegada del coronavirus. “Antes del covid desaparecían 500 comercios de proximidad cada año”, cuenta Armando, “un fenómeno que ya venía ocurriendo desde hace años”.
Es un problema antiguo que se ha visto agravado por las circunstancias de los dos últimos años y la manera en que se ha afrontado la pandemia, según Armando Rodríguez: “Mientras en otros países se ha sobrevivido a la crisis de base de los ahorros del pasado del pasado, en España todo se ha enfocado dejando a la gente que se hipoteque para el futuro con aplazamientos de préstamos”.
Para el presidente de Cocem, las ayudas que ha recibido el sector han sido insuficientes: “Eran pequeñas ‘tiritas’ que se han dado en las comunidades autónomas o ayuntamientos, como descuentos de impuestos, pero que no pueden solucionar una paralización de la actividad todo el tiempo que se ha paralizado”.
No existen cifras reales de cómo ha afectado la situación al comercio de proximidad, dice Armando: “ni nosotros, ni la administración, tenemos unos datos cualitativos y cuantitativos”. Las estadísticas del INE son insuficientes, según Armando Rodríguez, porque “engloban todo, no se segmentan mayoristas ni minoristas, venta ambulante, venta online, tipo de establecimiento, ...”.
“No hay ni idea de cuál es la realidad del sector”, por eso lo primero que pide el presidente de la Confederación de Comercios de Madrid, es la puesta en marcha de un Observatorio y que “se dediquen recursos a conocer la realidad del sector”. El siguiente paso sería “realizar un plan estratégico para el comercio”.
Aunque no hay cifras reales, sí se puede realizar una estimación de lo que el covid ha supuesto para el pequeño comercio: “En términos globales se puede hablar de, al menos, un 40-50% de pérdidas, a excepción de alimentación y electrodomésticos que han aguantado mucho mejor por las necesidades del consumo”. Los más afectados, “hasta un 80% de pérdidas, son los que dependían del turismo”.
Ante este panorama, no sólo el Black Friday, también la Navidad se ve “incierta en todos los sentidos”, A pesar de ello, dice Armando Rodríguez, “ya se nota hace meses una recuperación relativa; no se ha recuperado el nivel anterior a la pandemia pero nos permitimos un cierto optimismo y esperanza”.
Armando espera que “el futuro que viene sirva por lo menos para estabilizar la situación, pero necesitamos muchas cosas para que el comercio de proximidad sigua cumpliendo la función que ha tenido tradicionalmente”
El presidente de la Confederación de Comercio de Madrid, COCEM, reivindica el papel que juega el comercio de proximidad en ciudades, pueblos, barrios: “las calles necesitan ambiente, nosotros vivimos ese ambiente, las calles tienen todas las ventajas que les da el comercio en materia de seguridad, relaciones humanas … perder los comercios supone perder una cultura”.