El Ayuntamiento de Arroyomolinos y el Canal de Isabel II han iniciado obras de conexión de redes fecales y pluviales en puntos estratégicos de la ciudad como medida provisional y urgente "para evitar que las aguas fecales que discurren por la red actual acaben en los cauces en tiempo seco".
Estas obras tienen lugar después de que varias asociaciones ecologistas denunciaran en abril pasado la existencia de varios puntos de vertidos de aguas fecales que acababan en el Río Guadarrama a su paso por el municipio, acusando a las autoridades de "dejadez e ineficacia en materia medioambiental".
Existencia de pozos "ilegales"
El Ayuntamiento y Canal de Isabel II reconocieron entonces la existencia de pozos "ilegales" que vertían aguas fecales al sistema de alcantarillado del municipio, por lo que en algún punto de la red "había posibilidad" de que se hubiera mezclado con aguas pluviales y acabado en el río.Las obras consisten en la ejecución de varias zanjas a cielo abierto -con un ancho aproximado de entre uno y tres metros y una profundidad de entre dos y cuatro metros-, cuyas paredes también serán entibadas para evitar el desprendimiento de tierras y garantizar la integridad física de los trabajadores.
Desde el Consistorio han adelantado que las obras, que han comenzado esta semana en el primero de los puntos -la glorieta de confluencia entre calle Algeciras con calle Málaga-, tendrán una duración de dos meses.
Las primeras actuaciones que afectarán al tráfico rodado serán en la calle Santander y en calle Santoña con Avenida del Atlántico, ambas entre el próximo día 29 y el 2 de agosto en horario de 8:00 a 18.00 horas, última hora esta después de la cual se garantizará siempre que sea posible la circulación total de la vía.