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La Audiencia Provincial de Madrid juzga el martes que viene a un hombre con antecedentes penales por violación y que está acusado ahora de reincidir en sus agresiones en 2010 con dos prostitutas tras contactar con ellas por internet, y ante las que se hizo pasar por policía amenazándolas con una pistola. El procesado, Basilio Luis G.U., se enfrenta a 32 años y 4 meses de cárcel por los delitos de agresión sexual, violación, robo con violencia y una falta de lesiones, según el escrito provisional del fiscal.

La acusación particular, por su parte, eleva a 47 años de cárcel su petición de pena al añadir el delito de usurpación de funciones. La Policía Nacional detuvo al acusado, que tiene 49 años, en marzo de 2010 cuando supuestamente iba a cometer una tercera violación en Barcelona, aunque la investigación la inició el Servicio de Atención a la Familia (SAF) de Madrid.

Según informó entonces la Policía, Basilio Luis concertaba citas con prostitutas para mantener relaciones sexuales y, una vez en el domicilio de ellas, se hacía pasar por policía -llevaba consigo placa, pistola y grilletes falsos- y cometía las agresiones. Ahora va a ser juzgado por las agresiones a dos prostitutas el 27 de febrero de 2010.

El Ministerio Fiscal relata que ese día Basilio Luis, español, se presentó en un gabinete de masajes en la calle Unión -distrito Centro- tras concertar una cita previa con la mujer que lo regentaba. Después de identificarse como policía, le dijo a la víctima que había una denuncia contra ella por tráfico de drogas pero que antes de ir a la comisaría le tenía que enseñar su local.

Finalmente la ordenó que se desnudara, la agredió sexualmente, la golpeó en la cara con la culata de una pistola y la robó su bolso. A continuación, el procesado concertó por teléfono otra cita en el domicilio de una prostituta en la calle Jerte -también distrito Centro-, y al llegar se hizo pasar de nuevo como policía.

Esposó a la víctima y después la violó y la robó su bolso, según el escrito. El fiscal pide que el procesado pague a las víctimas unas indemnizaciones de hasta 10.350 euros. El acusado ya ha cumplido condenas por hechos similares y ha estado en la cárcel desde 1993, ya que al poco de salir en 2009 fue cuando presuntamente cometió las violaciones por las que la semana que viene será juzgado y por las que continúa en prisión.