La Policía Nacional ha solicitado colaboración ciudadana para tratar de identificar a un ciclista que agredió el 4 de mayo pasado a un varón de 59 años que paseaba en bicicleta con su nieta, de seis años, por un camino de Venta de la Rubia, en el término de Alcorcón, junto a la A-5.
Según ha adelantado el diario 'El Mundo' y han confirmado a Efe fuentes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid, los agentes están buscando pistas que les lleve a encontrar al agresor que dio la paliza al hombre, que tuvo que estar tres días ingresado en el hospital a consecuencia de las lesiones.
Ciclista a gran velocidad
Los hechos ocurrieron el 30 de mayo pasado, en torno a las 18.45 horas, cuando el abuelo, que paseaba con su nieta por un camino de Venta de la Rubia, tras ver venir a un ciclista hacia ellos a gran velocidad, le pidió a la niña que "tuviera cuidado" y que se posicionara a la derecha para dejarle pasar.
Según narró el hombre a los agentes cuando interpuso la denuncia, en un primer momento el ciclista continuó su camino, pero minutos más tarde volvió y se puso a la altura del abuelo y la nieta para increparle y preguntarle que qué le había dicho.
El abuelo le contestó que únicamente le había pedido cautela a su nieta, que iba detrás de él y, "sin mediar palabra", el ciclista propinó un puñetazo en el rostro que le hizo "caerse de la bicicleta", golpeándole después de caer al suelo y "pateándole por todo el cuerpo" ante los "lloros y gritos" de la niña.
La nieta, aterrada
El hombre tuvo que ser trasladado al Hospital Quirón Salud por la gravedad de sus lesiones y estuvo ingresado en el centro durante tres días, mientras que la nieta, que por suerte no sufrió agresión alguna por parte del ciclista, salió "muy aturdida y aterrada" por el suceso.
En su declaración, el abuelo aseguró que no conocía "para nada" al agresor, al que definió como "un hombre de origen español, de unos 35 años, de 1,70 metros de altura" y complexión "algo atlética", con pelo corto y castaño claro y que vestía maillot y culot de ciclista de color negro, con puntos naranjas en líneas verticales.
La Policía Nacional ha hecho pública esta agresión para intentar recabar alguna pista sobre la identidad de este individuo, ya que, al no haber cámaras de seguridad en la zona, se hace imprescindible la colaboración de cualquier persona que pueda haber visto al agresor por la zona ese día.