La rehabilitación de la pasarela de Marqués de Zafra, que une la Elipa y Ventas con el parque de la Quinta de la Fuente del Berro, sobre la M-30, contempla que sus usuarios deberán utilizar de forma temporal la pasarela de Ramón de Aguinaga que conecta Fuente del Berro con la calle de San Marcelo.
Así lo ha informado este martes el Ayuntamiento de Madrid, según el cual la pasarela de Marqués de Zafra, o de la Paz, ha debido ser cortada para el uso por peatones y ciclistas, y en la M-30 habrá cortes puntuales y parciales en horario nocturno.
Se trata de las obras de rehabilitación integral de la pasarela, que incluye la sustitución de sus 20 tirantes. En una nota de prensa remitida este martes, el Ayuntamiento informa de que los trabajos, con un presupuesto de 2,8 millones de euros cofinanciados por los fondos Next Generation de la Unión Europea, prevén la construcción de anclajes nuevos, la reparación del tablero y la renovación del alumbrado, entre otras actuaciones.
Según el Ayuntamiento, la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, ha supervisado esta mañana los trabajos emprendidos en la pasarela de Marqués de Zafra, cuya terminación está prevista para finales de este año.
Los trabajos consisten en la sustitución de los veinte tirantes que cuelgan de las pilas y sustentan todo el dintel, así como la construcción de anclajes verticales nuevos en los estribos.
Además, el proyecto contempla la reparación de las zonas deterioradas del tablero junto con la mejora de su drenaje e impermeabilización, colocando un nuevo pavimento de resina de poliuretano coloreada, dice la nota del Ayuntamiento.
"Está previsto retirar y sustituir barandillas, renovar completamente el alumbrado e instalar un sistema que permita la monitorización permanente de indicadores tan importantes como las vibraciones o el comportamiento de la estructura con los cambios de temperatura y de viento", dice el Ayuntamiento.
Obra del ingeniero Javier Manterola
La pasarela de Marqués de Zafra, proyectada hace medio siglo por el ingeniero Javier Manterola, fue la primera atirantada de Madrid y la tercera que se construyó en España, que supuso entonces un hito técnico por su diseño y por su concepto estructural.
La pasarela está compuesta por un dintel formado por tramos prefabricados de hormigón pretensado que suman una longitud total de 130 metros y unas pilas con forma de A con 25 metros de altura.