La Audiencia Provincial de Madrid inicia este viernes el juicio a tres policías nacionales que abatieron a tiros a un joven en 2021 en el distrito de Puente de Vallecas, y para los que la Fiscalía pide dos años y medio de cárcel por homicidio con la eximente incompleta de legítima defensa.
La Sección Segunda de la audiencia madrileña tiene previsto, inicialmente y a la espera de cómo se desarrolle la jornada, conformar el jurado popular que enjuiciará el caso, solventar las cuestiones previas y escuchar a los tres procesados, han detallado a EFE fuentes jurídicas.
El sindicato Jupol, cuyos servicios jurídicos defienden a los procesados, ha anunciado que acudirá a la puerta de la sede judicial para mostrar su apoyo a los agentes juzgados "por cumplir con su trabajo y defender sus vidas de un ataque violento", y denunciar "la situación de desamparo, abandono y desprotección en la que el Gobierno de España y el Ministerio del Interior mantiene a la Policía Nacional".
"Si estos agentes resultan definitivamente condenados, la Policía Nacional no puede tener habilitación para el uso del arma de fuego", ha añadido el sindicato en un comunicado.
El suceso tuvo lugar la noche del 26 de noviembre de 2021 en la casa de Kevin Bryan P., cuya madre llamó a la policía alertando de que el joven, de 21 años, estaba amenazando a la familia con un cuchillo. A la llegada de los agentes el joven trató de agredirles con el arma blanca reiteradamente, y los agentes le dispararon varias veces causándole la muerte.
De cara al juicio, la Fiscalía pide que cada agente sea condenado a dos años y medio de cárcel como coautor de un delito de homicidio pero con la eximente incompleta de legítima defensa, debido a que el joven no paraba de atacarles y temieron por su vida. También solicita que indemnicen a la madre del fallecido con 75.000 euros y al hermano con 25.000.
La petición de la Fiscalía ha variado a lo largo del proceso, ya que inicialmente solicitó que los agentes fueran condenados por homicidio con la citada eximente incompleta, pero en marzo de 2023 solicitó el archivo de la causa al apreciar, tras valorar nuevos informes, que concurría una eximente completa en su acción.
Después de que la Audiencia Provincial rechazara exculpar a los agentes, el Ministerio Público vuelve a pedir que sean condenados, han precisado a EFE fuentes jurídicas.
Según su relato, a las 21:00 horas del 6 de noviembre de 2021 los tres agentes se presentaron en un domicilio de Vallecas a requerimiento de la madre y del hermano de un joven que, según ellos, estaba "muy nervioso" y les había tratado de agredir con un cuchillo.
Una vez allí los acusados accedieron al inmueble y Kevin Bryan P. A. "sin mediar palabra", se abalanzó sobre ellos portando un cuchillo en la mano, con el que les acometió reiteradamente.
Lo hizo "dirigiendo el cuchillo a zonas vitales de los acusados", que tuvieron que retroceder "como consecuencia de las embestidas que ponían en peligro sus vidas, llegando a perder el escudo y a caer al suelo".
Ya en el rellano de la vivienda los acusados mantuvieron un forcejeo con el joven, "quien no cesaba en la intención de agredir a los mismos con el cuchillo", lo que supuso un riesgo "evidente" para la vida de los policías quienes "en aras a salvaguardar su integridad", le dispararon, continúa la Fiscalía.
Le dispararon tres agentes, hasta que otro policía logró reducirle.
El joven murió el mismo día de los hechos debido a la hemorragia que le causaron los seis impactos de bala que recibió de tres armas reglamentarias, explica la Fiscalía, que detalla que Kevin había consumido el día de los hechos MDMA, que potencia la agresividad.
Por su parte, la acusación que ejerce la madre del fallecido solicita una condena de diez años de cárcel para cada policía, sin eximentes, y una indemnización de más de medio millón de euros para la familia.