La falta de lluvias ha hecho que los bomberos y los forestales estén más alerta que nunca. El monte está muy seco y la Comunidad de Madrid ha adelantado la puesta en marcha de los medios contra incendios. Ante el peligro de que una chispa se convierta en un fuego que arrase el monte, las brigadas forestales realizan sus trabajos de limpieza y prevención acompañados por una autobomba con más de 3.000 litros de agua.
La Comunidad de Madrid ha activado los medios de extinción de incendios forestales que habitualmente se utilizan durante el verano ante el aumento de riesgo de incendios por la ausencia de lluvias. Según la Consejería de Presidencia y Justicia, los recursos se han incrementado en diez zonas consideradas de riesgo especial por su abundante y especial vegetación.
Así, autobombas forestales con carga para 3.500 litros de agua y usadas habitualmente en las campañas estivales se han activado en los retenes de Alcalá de Henares, Somosierra, San Martín de la Vega, Puebla de la Sierra, El Berrueco, San Martín de Valdeiglesias, Robledo de Chavela, Cenicientos, Galapagar y Cercedilla.
El departamento que dirige Regina Plañiol también ha dado indicaciones a las brigadas de no quemar los restos vegetales de las podas, rastrilleo y labores selvícolas a fin de minimizar el riesgo de propagación del fuego por el estrés hídrico que sufre la masa vegetal.
En los dos primeros meses de este año se han registrado 50 conatos de incendios en terrenos vegetales, lo que triplica el índice medio anual en estas fechas.
Los técnicos de la Dirección General de Protección Ciudadana achacan estos fuegos a la quema de restos vegetales pues, a pesar de la escasez de lluvia, las temperaturas no son tan elevadas como para que influyan en su origen. Por este motivo y aunque no se ha suspendido la tramitación para autorizar este tipo de quemas controladas, la Comunidad advierte de que podrían suspenderse o aplazarse en función de la meteorología o del riesgo del lugar donde se prevean realizar.
Desde diciembre a febrero se ha registrado unos 17,5 litros por metro cuadrado frente a la media histórica para estos meses de 128,3 litros por metro cuadrado.
La Consejería de Presidencia y Justicia pide a los madrileños que avisen al 112 si detectan humo en el monte, y recuerda que está prohibido hacer fuego en todo el terreno forestal de la región.