La Comunidad conservará 'in situ' los restos del palacio de Godoy

La consejera de Cultura y Turismo de la Comunidad de Madrid, Marta Rivera de la Cruz, apuesta por la conservación 'in situ' de los restos del palacio de Godoy hallados en la calle Bailén durante las obras de reforma de la Plaza de España, en la línea de la propuesta del Ayuntamiento de la capital.

"Estamos totalmente alineados", ha dicho Rivera refiriéndose a la postura de la Comunidad y del Ayuntamiento respecto a la conservación de los vestigios del palacio construido para los secretarios de Estado en el siglo XVIII, que fue demolido en el siglo XX, aunque solo en parte.

La consejera ha reconocido que "eso supondrá un esfuerzo presupuestario mayor y un poco más de paciencia", en alusión al incremento en el coste de las obras, que según han indicado fuentes municipales en declaraciones a Europa Press "no será elevado", y a su dilación durante un mes más de lo previsto.

"Hablamos de un mes, no estamos hablando de un retraso notable en las obras", ha apuntado la consejera respecto a la finalización de las obras, prevista para verano de 2021. "Pero, por nuestra parte, lo fundamental tiene que ser la conservación del patrimonio", ha recalcado Rivera. "El patrimonio es de todos, pero no solamente de los que estamos ahora sino también de los que vendrán después, y evidentemente si se puede conjugar la conservación y la utilización de un espacio hay que hacerlo", ha agregado.

"Yo celebro mucho que el Ayuntamiento tome esa decisión y por nuestra parte, todas las facilidades del mundo", ha manifestado la consejera, quien ha destacado que "desde el primer momento la colaboración ha sido total" y que ambas administraciones han "ido siempre de la mano".

En el marco de los trabajados de la reforma de Plaza de España se descubrieron que los restos arqueológicos hallados en el tramo de Bailén se corresponden con los sótanos de la parte del conocido como palacio de Godoy o palacio de Grimaldi que fue derribada.

La idea de construir un palacio para los secretarios de Estado, inicialmente destinado a Grimaldi, se planteó simultáneamente a la apertura de la calle Nueva (actualmente calle de Bailén) en 1772.

Las obras comenzaron en 1775 y es posible que concluyeran a finales de esa década, aunque la primera noticia de su ocupación es en el año 1782 por el sucesor de Grimaldi, Floridablanca.

El palacio se estructuraba alrededor de dos patios, el principal de planta rectangular tras el acceso y otro más pequeño, de trazado triangular, que permitía la iluminación de las crujías sobre la calle Bailén.

La configuración de este edifico tuvo vital importancia en la definición del espacio público de este entorno ya que el mismo se adaptó para resolver la convergencia de la calle Torija con la calle de Bailen.

En el año 1932 se demolió parte de este edificio, en particular la que se organizaba en torno al patio triangular, en el marco de las actuaciones para la ampliación de la calle de Bailén, quedando esta manzana alineada con la situada más al sur que ya estaba retranqueada con respecto a la alineación del Palacio Real y las Caballerizas.