Ignacio González recibirá la Gran Cruz de la Comunidad de Madrid como el resto de expresidentes de la región, tal y como recoge la legislación autonómica, aunque no está clara la fecha para entregarla y el Gobierno de Cristina Cifuentes se plantea desvincularla de los actos del Dos de Mayo. Así lo ha explicado la propia Cifuentes en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno preguntada por la concesión de esta condecoración a Ignacio González, ya que tradicionalmente los expresidentes la reciben en la fiesta del Dos de Mayo al año siguiente de abandonar su cargo, junto a los premiados con las medallas de oro de la Comunidad que se otorgan anualmente.
"No es cuestión de que sea procedente o no", ha dicho, porque la ley "dice que se les concede a los expresidentes, a todos", de manera que Ignacio González -que precisamente ayer tuvo que declarar ante el juez en Málaga por el caso del ático- tendrá también su Gran Cruz "porque así lo dice la legislación".
Otra cosa es la fecha en la que se le concederá, porque "lo que no dice la ley es que se tenga que hacer en este momento (en la fiesta del Dos de Mayo), con carácter de urgencia".
"En ningún momento nos hemos planteado no dársela", ha reiterado Cifuentes, tras recordar que la ley también contempla retirar ese reconocimiento si hay una condena judicial que pone en cuestión la honorabilidad de la persona.
Cifuentes ha explicado que su Gobierno se está planteando "desvincular" la concesión de condecoraciones de la fiesta del Dos de Mayo y que ésta se limite a un desfile militar y una recepción.
"Va a haber medallas en 2016, pero igual que nos estamos planteando hacer un menor número de condecoraciones -a veces se han dado excesivas- y preferimos que se den menos, para ponerlas más en valor", también se plantean que es preferible darlas "en otro momento".
La presidenta ha insistido en que es una Comisión quien determina a quién se conceden las medallas, y que esta comisión está todavía "valorando determinados perfiles y hablando con candidatos", pero ha defendido que la decisión de conceder estas condecoraciones no puede estar supeditada a un calendario ni debe adoptarse bajo "presión".
Porque "lo importante", ha seguido diciendo, es que el Gobierno y la sociedad madrileña "reconozcan los valores de determinadas personas que están contribuyendo de manera esencial a desarrollar nuestra sociedad". Y eso hay que decidirlo "tranquilamente, no con calendarios ni con prisas".
Decidir sacar estas condecoraciones de las fiestas del Dos de Mayo obedece, según ha repetido, a que su Gobierno prefiere hacer "actos más sencillos" que en legislaturas anteriores.