Condenada a 15 años de cárcel por matar a su recién nacida y tirarla a la basura en Madrid
- Asfixió a la bebé y la golpeó para luego depositarla en un contenedor con un crucifijo "en señal de duelo"
- Según el fiscal, el padre de la bebé desconocía que la acusada estuviera embarazada
La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a 15 años de cárcel a una mujer por asesinar hace diez años a su bebé recién nacida y tirarla a la basura.
Así consta en una sentencia, a la que tuvo acceso Europa Press, en la que se pena a Mayra Irene A.A., de origen ecuatoriano, por un delito de asesinato, con la agravante de parestesco.
El jurado popular que dictó el veredicto de culpabilidad consideró probado que la agresora tenía levemente disminuida sus capacidades para comprender sus actos debido a diferentes circunstancias como el hecho detener otra hija con unos meses, atravesar una crisis con su pareja, carecer de ingresos y la situación hormonal que sufría propia del parto.
En el juicio, la mujer defendió que la pequeña nació muerta y que la depositó en un contenedor envuelta en una mantita y con un crucifijo en "señal de duelo".
Juzgan en Madrid a una mujer que asfixió a su recién nacida y la tiró a la basura
A la condenada se la detuvo en abril de 2021, casi nueve años después, tras aparecer el cadáver en el centro de tratamiento de residuos urbanos de Valdemingómez. La mujer habría tirado el cadáver a la basura, según las investigaciones. Según el fiscal, el padre de la bebé desconocía que la acusada estuviera embarazada.
La sentencia da por acreditado que la mujer golpeó a la bebé recién nacida, lesiones certificadas por el examen forense. Los expertos determinaron en el informe pericial que la pequeña "nació con buen estado de salud", ya que no tenía "ninguna malformación ni patología de etiología natural".
La asfixió y la golpeó
El escrito de acusación señala que en la madrugada del 20 de mayo de 2012, M. I. A. A. se encontraba en su domicilio de Madrid donde dio a luz a una niña viva.
A continuación, "con la intención de acabar con su vida, y siendo consciente de que se trataba de una niña recién nacida, carente de toda posibilidad de defensa", le produjo un mecanismo de asfixia en el cuello y le propinó múltiples y fuertes golpes en la cabeza que le produjeron la fractura de ambos parietales que provocaron una importante hemorragia subdural.
La acusada se encuentra privada preventivamente de libertad por estos hechos desde el día 16 de marzo de 2021.
