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(Actualizado

La Audiencia Provincial de Madrid ha condenado a ocho años de prisión al hombre que disparó con una ballesta a la actriz Sara Casasnovas a la salida del teatro Reina Victoria de Madrid, el 7 de junio de 2009. La sentencia prohíbe a Arndt M., de 39 años de edad y nacionalidad alemana, acercarse a menos de 500 metros y a comunicarse con la actriz durante los próximos 9 años.

La condena ha sido cuatro años y medio menor a la pedida por las acusaciones, que en el juicio solicitaron doce años y medio de cárcel para el acusado por un delito de homicidio en grado de tentativa y dos de tenencia ilícita de armas.

La sección segunda de la Audiencia Provincial ha absuelto a Arndt M. de uno de los delitos de tenencia ilícita de armas, porque considera punible que portara una defensa eléctrica, pero no que llevara consigo dos ballestas y sprays de defensa porque "no son armas prohibidas".

La Audiencia, por tanto, condena a Arndt M. a seis años y tres meses de prisión por el delito de homicidio en grado de tentativa y a un año y nueve meses de cárcel por otro de tenencia ilícita de armas, ambos con la circunstancia atenuante de trastorno de la personalidad.

La sentencia asegura que las facultades volitivas -referentes a la voluntad- del condenado estarían "mermadas en un grado leve-moderado", pero que "tal anomalía no tiene la intensidad suficiente para apreciar la eximente incompleta", tal y como solicitó la defensa durante la vista oral, que se celebró el pasado 29 de junio.

En ella, Arndt M. se dirigió a Casasnovas -conocida por sus trabajos en series de televisión como "El Comisario" o "Amar en tiempos revueltos"- para decirle con voz llorosa: "Yo te amo, nunca te haría daño" y para explicarle que no era cierto que la agarrara por el cuello.

La actriz, de 26 años, reconoció ante el tribunal que sabía de la existencia del procesado desde un año y medio antes del incidente y que, desde entonces, recibía cartas en las que el detenido le mostraba "amor y adoración" y dijo que también acudía a sus camerinos y a los lugares de rodaje.

El procesado, por su parte, dijo que si apuntó a Sara con una ballesta fue para quitarse la vida delante de ella si no le hacía caso. No obstante, la sentencia afirma que "ese extremo queda desvirtuado" por las declaraciones de los testigos, que durante el juicio relataron cómo el acusado se acercó a Casasnovas para pedirle explicaciones sobre una carta de amor que le había entregado el día de antes.

La actriz le contestó diciendo que ella no era una "ficción" sino una "realidad", ante lo que el procesado respondió sacando una ballesta y apuntándola a la cara.

Casasnovas explicó que reaccionó "instintivamente" girando la cabeza y que pudo esquivar la flecha, que se incrustó en la manga de la chaqueta del actor Juan Antonio Quintana, que también declaró como testigo en la vista. La joven reconoció durante el juicio que seguía "estando alerta" porque en el teatro donde trabaja actualmente recibió un paquete -enviado desde un centro penitenciario- lleno de cartas, estampitas de vírgenes y fotos de ella y de personas muertas.