Conmoción en Colmenarejo al morir una mujer de 49 años mientras comía un bocadillo de calamares en la terraza de un bar de la Plaza de la Constitución de ese municipio. Aunque en un principio se informó que el fallecimiento se debió a un atragantamiento, el informe forense confirmó más tarde que todo se debió a un ictus.
Al llegar el 112 encontraron a la accidentada en estado cianótico y en parada cardiorrespiratoria, que no pudieron revertir. Previamente, miembros de Protección Civil habían intentado recuperarla practicándola la maniobra de Heimlich pensando que podía ser un atragantamiento. Finalmente, se certificó su muerte.
La fallecida vivía en una residencia para personas con discapacidad intelectual y se encontraba con varios familiares que habían ido a visitarla.
Precisamente, fuentes de esta residencia han confirmado a Telemadrid que el informe forense ha indicado que la muerte se debió al sufrir un ictus que le dio mientras comía un bocadillo. Fuentes del Summa 112 tampoco confirman que el fallecimiento haya sido por un atragantamiento.