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Los análisis de muestras del agua y las orillas del río Henares realizados por técnicos de la Unidad Militar del Emergencias desplazados al incendio de Chiloeches (Guadalajara) han ofrecido parámetros "absolutamente normales" que descartan la contaminación del río por vertidos químicos.

Según ha explicado en una comparecencia el teniente coronel de la UME Juan del Hierro, los tres diques que se realizaron para evitar esos vertidos han funcionado perfectamente y hasta las barreras de contención desplegadas en el río (que discurre en parte por la Comunidad de Madrid) no ha llegado ninguna sustancia.

Por su parte, el jefe de extinción del incendio, César Izquierdo, ha señalado que las labores "avanzan a buen paso de forma definitiva y firme" y ya se ha empezado a trabajar en la retirada de sustancias químicas almacenadas dentro de la instalación, a las que no se había podido acceder hasta el momento.

También trabajan en la demolición de la nave principal de la instalación para poder acceder con más facilidad a los pequeños focos que continúan activos.

Según ha adelantado, las tareas de extinción "durarán todavía varios días" a pesar de que las actuaciones que se están realizando "están siendo muy eficaces".

Asimismo, el teniente coronel de la Guardia Civil de la comandancia de Guadalajara Pascual Segura ha señalado que la investigación sobre las causas que originaron el fuego y el paradero de los responsables de la empresa continúa su curso en manos de la Policía Judicial y el Seprona.

Por otra parte, un total de 105 personas siguen trabajando en las labores de extinción del incendio declarado el pasado viernes en una planta de reciclaje de productos industriales en la localidad guadalajareña de Chiloeches.

Desde el Servicio de Atención de Urgencias 112 de Castilla-La Mancha han indicado a Europa Press que las labores de estos efectivos se centran en el interior la propia nave de la propia planta, una vez el fuego ha sido controlado y perimetrado.

Entre los efectivos, hay cinco bomberos, 65 efectivos de la Unidad Militar de Emergencia, 12 guardias civiles y cuatro profesionales del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, que no han tenido que intervenir.