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La candidata del PP a presidir la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, confía en que el centro derecha "acabará unido otra vez" y en que los votantes que se han marchado a Vox regresarán a "casa" con un PP sin "miedo a etiquetas", que a su juicio debe "mirar atrás" para "encontrarse a sí mismo".

Así lo ha defendido la secretaria de Comunicación del PP en una entrevista con "El Independiente" publicada este sábado, la primera que hace después de que Pablo Casado la designase en la noche de ayer como su candidata en la comunidad.

Díaz Ayuso se muestra convencida de que no revalidar la Presidencia del Gobierno autonómico haría "colapsar" a los servicios públicos y tiene la convicción de que tanto su candidatura como la que José Luis Martínez-Almeida encabezará en la capital serán las listas más votadas.

"Vamos a volver a despuntar"

"Vamos a ser los primeros y ahora ya con candidatos vamos a volver a despuntar", defiende, admitiendo también que con nuevos actores no saben "cómo van a estar", al ser preguntada por un posible intercambio de cromos con Ciudadanos entre la capital y la región.

Del actual presidente madrileño, Ángel Garrido, señala que ha hecho un "grandísimo trabajo" en la gestión, pero considera que en Madrid había que elegir a "los mejores".

"Hay una dictadura feminista"

La candidata del PP aboga además por pensar por qué su electorado se ha marchado a Vox. "Hay un porcentaje de voto de Vox que nunca ha sido nuestro, pero la inmensa mayoría sí", asegura y considera que el partido liderado por Santiago Abascal no fomenta el odio, sino que es la respuesta al "sanchismo" y al odio alimentado por Podemos.

"Hay una dictadura feminista", defiende y acusa a la izquierda de dividir "al hombre de la mujer", de hacer que las mujeres se sientan "desvalidas" y de criminalizar a los hombres para sacar rédito político.

Hombres y mujeres "han de ser exactamente iguales ante la justicia. Que un hombre, por el hecho de ser hombre, no tenga presunción de culpabilidad y a una mujer, por el hecho de ser mujer, no se la tiene que creer", añade la dirigente del PP.