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La Guardia Civil ha detenido a diez personas por supuestamente robar casi un centenar de joyas en las casas en las que trabajaban y durante mudanzas en diversas localidades del noroeste, norte y centro de la Comunidad de Madrid.

Entre los arrestados se encuentran siete empleadas del hogar y tres hombres que trabajaban en empresas de mudanzas, ha informado la Comandancia de Madrid del instituto armado.

Entre mayo y septiembre los agentes han esclarecido un total de 37 hechos delictivos contra el patrimonio en diferentes municipios madrileños, todos ellos a manos de los sospechosos y llevados a cabo de dos maneras.

Por una parte las mujeres aprovechaban la confianza con los propietarios de las viviendas en las que trabajaban para sustraer joyas que después vendían en establecimientos de compraventa de metales preciosos, en los que firmaban un documento asegurando ser las legítimas propietarias de las mismas.

Mientras, los hombres actuaban en el momento de trasladar cajas durante las mudanzas, de las que también sustraían joyas y las vendían en los mismos locales.

Tras el arresto de los diez supuestos ladrones los investigadores lograron recuperar 90 piezas de joyería con un peso total de 414 gramos de oro de 18 quilates.