El Ayuntamiento de Madrid deniega el permiso para un acto de homenaje a migrantes fallecidos
El consistorio alega que el evento, previsto entre las 11:00 y las 14:00 horas del mediodía, podría perturbar el descanso vecinal
El Ayuntamiento de Madrid ha denegado el permiso de autorización para la celebración de un acto de recuerdo a las personas migrantes fallecidas, el próximo sábado 27 de enero en la plaza de la Emperatriz del distrito de Carabanchel, alegando que el evento, previsto entre las 11:00 y las 14:00 horas del mediodía, podría perturbar el descanso vecinal.
Así lo traslada la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto en un comunicado remitido a los medios este martes, en el que responsabilizan al presidente del distrito, Carlos Izquierdo, de la decisión de no conceder la autorización pertinente, que, denuncian los vecinos, “mutila el articulado de la ordenanza del ruido en la que pretende basarse”.
La entidad asegura que el Consistorio se ampara en el artículo 41 de la Ordenanza de Protección contra la contaminación acústica y térmica del 25 de febrero del 2011, que establece que “las actuaciones musicales en la vía o espacios públicos no podrán ocasionar molestias que impidan el descanso de los vecinos o el normal desenvolvimiento de las actividades propias del local receptor ni afectar a los objetos de calidad acústica que se establezcan por la normativa de ruido”.
“La consulta al citado artículo 41 de la mencionada ordenanza expone que las actuaciones musicales en la vía o espacios públicos no estarán sometidas a autorización administrativa en lo que se refiere al ámbito de aplicación de esta ordenanza, sin perjuicio de que no podrán ocasionar molestias que impiden el descanso”, prosiguen los vecinos.
En su opinión, la “desautorización municipal” se basa en un artículo que “explícitamente no es aplicable” en tanto que “entre las 11:00 y las 14:00 horas, difícilmente puede impedir el descanso de los vecinos”, por lo que tildan la decisión de “un atropello intolerable a la libertad de expresión, un abuso de autoridad y una decisión contraria a la legislación del propio Ayuntamiento”.
La asociación avanza que se reservará el derecho a presentar “cuantas reclamaciones estime convenientes” así como a explorar “otras vías para la celebración del citado acto”.
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