El 'aprendiz de río' baja con fuerza estos días con un caudal tremendo e inundando zonas de Madrid
El río Manzanares a su paso por el puente de los Franceses, a 21 de marzo de 2025 |EUROPA PRESS
REDACCIÓN
La crecida de estas últimas jornadas del río Manzanares, siendo muy importante, no es de las más llamativas ni la más dañina por ahora
En marzo 1947 el Manzanares dejó atrapadas a varias personas en la piscina La Isla construida en mitad del cauce. En 1960 y 1966 las crecidas hicieron no se supiera dónde estaban las orillas al abarcar el desbordamiento las aceras y calzadas de la Avenida del Manzanares.
En 1995 se anegó un tramo de la M-30 por las lluvias y la subida de nivel quedando coches hundidos. En el siglo XXI las lluvias, otra vez, y la cercanía del Manzanares a los túneles han provocado varias incidencias obligando a cortar la circulación.
El río Manzanares tras superar una de las presas urbanas en Madrid |EUROPA PRESS
Puentes destruidos por la fuerza del agua, reconstruidos y vueltos a construir ha sido una constante en la historia de este curso de poco más de 90 kilómetros, que nace en el Ventisquero de la Condesa, al lado de la Bola del Mundo, y muere al juntar sus aguas con las del Jarama en el Parque Regional del Sureste.
Cuentan que cuando Felipe II quiso construir un puente sólido sobre las aguas (el Puente de Segovia, 1574) le recomendaron que mejor comprara otro río. No se sabe si aquí empezaron las burlas hacia el Manzanares.
Pero hay un hecho cierto. Antes de llamarse río Manzanares se llamaba río Guadarrama por su contenido en arenas (eso significa guadarrama en árabe). O llevaba muchas arenas en suspensión o es que había más arena que agua en el cauce.
Cuenta Ángel Sánchez Crespo en '101 curiosidades de la Historia de Madrid' que a pesar de los intentos el Manzanares no fue navegable. No como se pensó al creer que se podría alcanzar el Tajo, Lisboa y el Atlántico. Ya se sabe que la idea quedó en un canal fluvial hasta Aranjuez.
El francés Alejandro Dumas padre, de paso por Madrid, tras beber medio vaso de agua tiró la otra mitad al río afirmando que le hacía más falta que a él.
Cuando bajen las aguas tal vez regresen las burlas. Pero será bueno recodar que el Manzanares de tarde en tarde vuelve por sus fueros. Avisados estamos.