La jueza de Instrucción número 3 de Majadahonda ha puesto en libertad a los cinco detenidos ayer durante el desalojo de un edificio okupado en Majadahonda a raíz de los altercados ocurridos el pasado miércoles en un intento fallido de desokupación, han informado fuentes jurídicas.
La juez ha dejado este lunes en libertad provisional con medidas cautelares a dos de los cinco detenidos durante el desalojo de un edificio okupado en la citada localidad, mientras que los otros tres arrestados fueron puestos en libertad por la Guardia Civil este domingo.
Tras pasar a disposición judicial, se les ha impuesto a dos de ellos la medida cautelar de comparecer cada 15 días en el juzgado.
Se les imputan delitos de amenazas con objeto peligroso y defraudación de fluido eléctrico a ambos, y a uno de ellos, Younes H., además delito de lesiones con objeto peligroso.
Las detenciones se produjeron ayer en el marco de un operativo formado por 150 agentes de la Guardia Civil y 30 efectivos de la Policía Local tras el intento fallido de desalojo de la pasada semana.
El dispositivo arrancó a primera hora de ayer después de que la empresa Desokupa solicitara al Juzgado una medida cautelar de desalojo inmediato como consecuencia de los graves altercados vividos en el anterior intento desalojo en el que los okupas incurrieron en un concurso de delitos.
El pasado miércoles, un vigilante resultó herido con un corte en la mano en el transcurso de los incidentes que se produjeron en el rellano del inmueble, donde los okupas del bloque lanzaron pedradas a los agentes y a los miembros de Desokupa. Además, amenazaron a los efectivos con cuchillos de grandes dimensiones.
Los delincuentes sumaban una ristra de antecedentes penales y condenas por delitos de robo con fuerza, lesiones y atentado a la autoridad, entre otras infracciones.
Así consta en el auto, al que tuvo acceso Europa Press, por el que la jueza ordenó el pasado 13 de abril el desalojo inmediato del inmueble ante el riesgo de incendio y las manifestaciones violentas de los okupas al lanzar en un intento fallido de desalojo muebles y pedradas desde la ventana a agentes de la Guardia Civil.
Según fuentes de la Guardia Civil, los okupas tenían preparados todo tipo de objetos contundentes para amenazar y lanzar desde los balcones del edificio, entre ellos adoquines, armas blancas, botellas de butano y otros enseres que utilizaron durante los altercados del pasado miércoles.