El Rey recibirá el próximo viernes a la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y a la presidenta del Gobierno regional madrileño, Cristina Cifuentes, en sendas audiencias en el Palacio de la Zarzuela convocadas este miércoles.
La audiencia a Carmena, solicitada por la propia alcaldesa, según han informado a Efe fuentes municipales, ha sido concedida tras su elección en un cargo que está presente en numerosas actividades institucionales de la Corona y la Familia Real, tal como han recordado fuentes de la Casa del Rey.
En cuanto al encuentro con Cifuentes, supone reemprender las reuniones con presidentes autonómicos que don Felipe, tras ser proclamado Rey, abrió el 21 de octubre de 2014 con el entonces jefe del Ejecutivo regional madrileño, Ignacio González, y continuó un mes más tarde con el lehendakari, Íñigo Urkullu, en la segunda y última audiencia autonómica celebrada hasta ahora.
Una vez que ha finalizado el proceso de constitución de los Parlamentos regionales y está a punto de hacerlo el de la elección de presidentes, el Rey ha decidido reemprender sus reuniones con jefes de Gobiernos autonómicos, unos encuentros para los que no se ha fijado un calendario concreto y que tampoco seguirán un orden preestablecido.
Cifuentes, la candidata del PP que fue investida presidenta del Ejecutivo madrileño el pasado día 24 con los apoyos de su partido y de Ciudadanos, será la primera en encontrarse con don Felipe, en torno a las diez de la mañana, mientras que Carmena, proclamada alcaldesa el 13 de junio con los votos de sus 20 concejales de Ahora Madrid y los nueve del PSOE, ha sido convocada para las 11:30 horas.
Cuando, el pasado octubre, el Monarca citó en la Zarzuela a Ignacio González, la Casa del Rey precisó que el hecho de que en la Comunidad de Madrid se encuentre la capital de España y la sede de la Jefatura del Estado había pesado, junto a razones de agenda, en la circunstancia de que fuera el primer presidente autonómico recibido por Felipe VI en la Zarzuela.
Tanto entonces como con ocasión de la posterior reunión con Urkullu, la Casa del Rey insistió en dejar claro que no había ningún orden prefijado para estas audiencias con los presidentes de comunidades y ciudades autónomas, de modo que se irían cerrando fundamentalmente en función de las respectivas agendas