El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible del Ayuntamiento de Madrid, José Manuel Calvo, ha explicado hoy que los carriles de Gran Vía que se cerrarán al tráfico y se cederán a los peatones en Navidad seguirán restringidos a los coches hasta el inicio de las obras como medida disuasoria.
Manteniendo la ampliación del espacio peatonal de Gran Vía -que en las pasadas navidades se hizo mediante vallas y señales pintadas en el asfalto- el Consistorio busca reducir la afluencia de tráfico privado, es decir, los coches podrán circular pero tendrán menos espacio para hacerlo. "No hay cierre al tráfico como tal, lo que hay es reducción del espacio para el coche", ha recalcado Calvo a preguntas del Partido Popular y del PSOE-M en la comisión municipal de Desarrollo Urbano Sostenible.
El criterio de selección de vehículos -podrán entrar los de transporte público, residentes, mercancías y otras excepciones- comenzará en el mes de junio con el establecimiento de la Zona Central de Cero Emisiones, que cerrará el distrito centro a los no residentes como parte del Plan A, ha añadido el delegado.
Tanto Álvaro González (PP) como Mercedes González (PSOE-M) han acusado a Calvo de rectificar tanto en las obras que se iban a acometer en la Gran Vía, su plazo y su coste, como respecto a las medidas de restricción del tráfico.
Ambos han achacado a supuestos conflictos internos entre el área que lidera Calvo y la de Medio Ambiente y Movilidad, dirigida por Inés Sabanés, dichos cambios. "No se ha rectificado nada, se dijo que se mantendría la restricción de carriles de Navidad y eso es lo que se va a hacer. Durante un mes y medio habrá una restricción de carriles" y manteniendo esa disuasión se "facilitará la realización de la obra", ha reiterado Calvo.
LAS OBRAS PODRÍAN ABARATARSE Y TERMINAR ANTES SEGÚN CALVO
José Manuel Calvo ha asegurado que el coste de las obras de Gran Vía podrían tener un coste similar al anunciado inicialmente, de 5 millones, pese a que se liciten en 9 millones y podrían ejecutarse en un plazo menor a 13 meses. Así lo ha explicado el concejal en la comisión municipal de su área, donde ha destacado que las concesionarias concursan con ofertas menores al precio de licitación y que de media el Ayuntamiento está adjudicando obras por un coste un 25 % menor al de la licitación.
Por ello y añadiendo el IVA a los 5 millones anunciados, el coste no se ha incrementaría respecto al planificado inicialmente, ha defendido Calvo. Lo mismo ocurre con el plazo para ejecutar las obras, que se anunciaron en 10 meses y al que se sumaron 3 hasta un plazo de 13, según manifestó la portavoz del Gobierno municipal, Rita Maestre, que anunció que los trabajos terminarían en primavera de 2019.
Dicho plazo se podría acortar a 10 meses de ejecución anunciados inicialmente, ya que el Consistorio ha alargado el plazo de licitación pero éste podría ser menor, ha detallado Calvo. Así, el concejal de Ahora Madrid ha negado que el Gobierno de Manuela Carmena haya rectificado respecto a los plazos, el coste y el contenido de las obras que se van a acometer en Gran Vía, como denuncia la oposición municipal.
Tampoco se ha rectificado respecto a las intenciones de peatonalizar este eje según el delegado, que cree que este término es "periodístico" y no se corresponde con las intenciones del equipo de Gobierno, que nunca ha dicho que se eliminase el tráfico de residentes o del transporte público en Gran Vía.
El delegado de Desarrollo Urbano Sostenible sí ha reconocido un cambio respecto al planteamiento inicial, que abogaba por un pavimento continuo, con calzadas y aceras al mismo nivel, y que finalmente no será el modelo elegido tras mantener reuniones con colectivos de personas con discapacidad. La pavimentación continua planteaba problemas por ejemplo a la hora de organizar las paradas de autobuses, ha explicado el delegado.
Explicaciones que no ha aceptado el Partido Popular, cuyo edil Álvaro González ha criticado además que el Consistorio no haya hecho la "pregunta con mayúsculas" a la ciudadanía, si está a favor o no de cerrar al tráfico Gran Vía. González ha acusado a Calvo de invertir 9 millones en ampliar las aceras de Gran Vía en una "obra que no ha pedido nadie" mientras deja en la "languidez" el resto de vías.
De "generoso" ha calificado González que el Gobierno municipal diga que no ha rectificado y ha recordado que el Ayuntamiento habló de peatonalización, después de simipeatonalización y finalmente plantea reducir carriles, dejando cuatro, y ampliar aceras. A preguntas del PSOE-M, Calvo ha anunciado asimismo que los ganadores para reformar las seis plazas aledañas, que buscan ser espacio de estancia, se conocerán el próximo mes de noviembre.