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La Guardia Civil ha detenido a cinco ciudadanos de nacionalidad polaca como presuntos integrantes de una banda dedicada a robar coches que despiezaban en un taller mecánico propio en la localidad madrileña de San Martín de la Vega.

Según informa el Instituto Armado, se les imputa al menos 17 robos de automóviles en la zona sur de la Comunidad de Madrid desde el mes de abril, sobre todo en Pinto, y el operativo se ha saldado con cinco detenidos.

Agentes pertenecientes al Area de Investigación del Puesto Principal de Pinto han realizado las pesquisas y han logrado recuperar multitud de piezas ubicadas en una nave que usaban los detenidos para "enfriar" y despiezar los automóviles. Las piezas y resto de los automóviles están ahora en estudio, por lo que no se descarta que los miembros de este grupo pudieran estar implicados en otros robos.

CONEXIÓN CON TALLERES ILEGALES

La investigación se inició tras la denuncia de un ciudadano que alertó de que acudió a un taller regentado por los arrestados y que tenían precios más bajos en las reparaciones que otros establecimientos de la zona. Con esta información, se comenzó a sospechar de que la actividad de este taller escondiera en el fondo algún tipo de actividad ilícita.

A partir de este momento, la Guardia Civil del Puesto de Pinto, iniciaban sus investigaciones identificando a los regentes del establecimiento, los cuales cuentan con amplio palmarés delictivo, estando relacionado con el robo, despiece y venta de piezas de vehículos.

Fruto de las vigilancias establecidas por los agentes, se pudo constatar que los ya detenidos contaban con una nave situada en San Martín de la Vega, lugar donde trasladaban los vehículos tras sus sustracción, y donde eran despiezados para su posterior venta a otros talleres o uso de las mismas en el establecimiento de su propiedad.

En el grupo destacan dos de los detenidos por su pericia para la sustracción de vehículos, otros dos eran los encargados del despiece, ya que tienen un alto grado de conocimiento en mecánica y el último era el encargado de comercializar las piezas.Los detenidos, con edades comprendidas entre los 37 y 60 años de edad, cuentan todos con antecedentes delictivos por hechos similares, habiendo sido puestos a disposición de la Autoridad Judicial competente.