El expresidente de la Comunidad de Madrid Ignacio González djijo al expresidente valenciano Eduardo Zaplana que su antecesora, Esperanza Aguirre, era una "hija de puta", a la que había mandado "a tomar por culo" en los tejemanejes internos del último congreso regional del PP de Madrid, y que ella sabe que "está muerta" pero que seguía en política porque "necesita el servicio". Así consta en una conversación entre ambos grabada en el despacho de González hace unos meses, incluidas en la investigación del caso Lezo, y a la que ha tenido acceso Europa Press.
En un momento dado, González asegura que Aguirre es una "hija de puta". "Yo no sé si es una hija de puta, o es que ha perdido la cabeza hace tiempo, pero lo único que te trae ya son problemas. Va largando por ahí. Y por eso hace mucho tiempo no que hablo con ella", le responde Zaplana.
El expresidente madrileño le cuenta que ella le llamó dos veces "histérica" por una información de prensa sobre presuntas corruptelas en el PP de Madrid, pero que "le mandó a tomar por culo" porque él "ya no se dedicaba a eso". "Me dijo que saliera, pero yo le dije que saliera ella y que dijera lo que saliera de los huevos", añadió.
En la segunda llamada, según sigue confesando González, Aguirre le pide que le aconsejara para que recomendar al concejal madrileña Iñigo Henríquez de Luna presentarse o no a la presidenta del PP de Madrid, que finalmente ganó por abrumadora mayoría la actual presidenta regional, Cristina Cifuentes y en la que el edil no concurrió finalmente.
"Me dijo que Iñigo quería presentarse al Congreso de Madrid y me preguntó cómo lo veía. Yo le respondí que si no se lo habían trabajado nada, era como el que tiene una tía en Alcalá. A ella lo que le preocupaba es que dijeran que (Henríquez de Luna) era el Manolo Cobo suyo y le iban a echar a ella la culpa. Yo le comenté a Esperanza que no tenía ni puta idea porque estaba fuera, pero me había llegado que ya había malestar con Cristina y su gente. Entonces me llama Iñigo para tomar un café conmigo", manifiesta.
Entonces, Ignacio González cuenta al expresidente valenciano los pormenores de ese encuentro con Henríquez de Luna. Según expone, allí le asegura que no le parece mal que se presente contra Cifuentes. "Yo te digo lo que me dijo Esperanza, que hay que perder para ganar", manifiesto. "Te he leído que has presentado una enmienda para que se meta en los estatutos que si el otro candidato supera el 10 por ciento tenga uno puesto en el comité ejecutivo. Yo estoy en contra, pero es lo único inteligente que he oído. Si tu quieres pelear con eso no me parece mal pero si no vas a lograrlo, ahórrate la hostia", le dice al edil madrileño González, según le reproduce a Zaplana.
"No puedes contar con Esperanza, no te va a ayudar, está a su puto culo. Pero si tienes un mínimo que te eche una mano para superar el 10 por ciento es bueno, es la única manera de proteger algo. Aprovecha este rollito de la transparencia y tal. Pero que sepas que Esperanza te va a poner todo tipo de problemas, pasa de ella", agrega.
En ese punto, González confiesa a Zaplana que el concejal madrileño es "un tonto de cojones que no tiene recorrido". "Me dijo que había pensado que le apoyara alguien, como Aznar, Botella o Alvarez de Manzano. Y le contesté que todo lo que se identificara con eso es naftalina y que él ya era naftalina", señala.
Entonces le recomienda a Henríquez de Luna que se separe de Aguirre y que busque, "si llega", el apoyo de la vicepresidenta del Gobierno de España, Soraya Sáenz de Santamaría, "para tocar los huevos a la otra", en referencia a Cifuentes. González confiesa a Zaplana que "echarse en manos ésta es la desesperación más absoluta, pero en el entorno de Soraya odian a Cristina Cifuentes ahora".
El expresidente madrileño apunta que en medio de ese café llamó por teléfono Esperanza Aguirre y le reconoció que Henríquez de Luna "no iba a sacar nada y que ella no quería que dijeran que le había ganado Cifuentes 95 a 5, ni le interesaba que la acusaran de dividir el partido". "Yo le contesto que yo estoy fuera y que lo arreglen entre ellos", añade. No obstante, Ignacio González siguió dando consejos al edil madrileño y le contó que Aguirre "era igual que Rajoy, un tío con complejo e hijo de puta de que no te puedes fiar que quiere superar a Franco en la Presidencia del Gobierno".
En su opinión, para ellos dos "todo lo demás es instrumental". "Los demás somos el puto servicio, con mejor o peor trato. Y les da por culo si les va bien o mal. Te usan, eres el servicio, un ser que molesta. Olvídate de todo porque ésta no te va apoyar. Esta quiere seguir", le dijo a Henríquez de Luna.
En ese momento, Zaplana le corta la conversación preguntándose cómo puede seguir Aguirre si "hace el ridículo y la gente se la toma a coña". "Esperanza sabe que está muerta y yo se lo he dicho mil veces. Ella lo sabe, pero todo le importa un pito salvo ella. Y en este estatus que cree que es una mierda, pero ella necesita el servicio. Tiene tres secretarias para comprar las medias, atender a la tía Malu, hacerle todos los recados y las que llevan los regalos de los niños. Tiene un chófer que la lleva y la trae. Tienen 40 para de vez en cuando echarles una bronca", le responde González.
"Ella se va a Salamanca a jugar al golf. Se la bufa. Y llegará un momento que cuando se vayan acercando las elecciones intentará ser candidata. Si sale y gana, pues otra vez estará aquí y tendrá más servicio", prosigue.
El expresidente valenciano insiste en que Aguirre "ya no tiene la buena imagen en la derecha madrileña que tenía antes". "Siempre ha estado bien rodeada, contigo, con Granados, que trabajaba; y en distintos niveles le habéis dado el trabajo hecho", añade.
Pero González interrumpe su argumento afirmando que la expresidenta madrileña es "más lista de que lo parece" y que tiene "un problema de jeta y comodidad. Zaplana indica que Rajoy "no la puede ni ver" y que "la odiaba", pero que apostó por ella como candidata a la Alcaldía de Madrid para "follarte a ti", en referencia al exdirigente madrileño. "Sabe que quitándote de en medio se acaba ella", le espeta.
El expresidente madrileño asiente y se muestra "totalmente" de acuerdo con ese análisis. "Mariano volverá a ser el candidato, sí, no hace falta que la cosa mejores. Y ésta (Aguirre), si tiene la más mínima posibilidad y al otro se la suda, volverá a ser la candidata, porque a ella le resbalan ya lo que le digan. Se la suda. Lo que le importa es el servicio. Los ciento y mil pico de euros que le pagaba el tío de la Barcelona es un buen sueldo y así viajaba de vez en cuando y ya está. Y eso es Esperanza Aguirre y si le toca la lotería y es alcaldesa, revive", apostilla.