La Policía Municipal de Madrid ha intervenido más de 1.800 kilos de alimentos procedentes de Marruecos por incumplir las normas sanitarias, ya que carecían del etiquetado correspondiente y no estaban refrigerados.
Ocurrió después de que los agentes recibiesen un aviso de que un camión de mercancías había sufrido una avería en la M-30 y se encontraba apartado en el carril derecho de la vía.
Una vez en el lugar, identificaron a los ocupantes, el conductor y un segundo hombre, y revisaron el camión para tratar de determinar qué había provocado la avería, ha informado el cuerpo municipal.
En ese momento vieron que en la caja de carga había una gran cantidad de alimentos procedentes de Marruecos que incumplían varias normativas sanitarias.
SIN REFRIGERACIÓN
En concreto, carecían del etiquetado europeo y no estaban refrigerados aunque muchos de ellos lo requerían, motivo por el que los agentes de la comisaría de servicios especiales levantaron un acta administrativa.
Según manifestaron los propios ocupantes del camión, habían recogido la carga en la frontera con Marruecos e iban a distribuirlos por distintos comercios de Madrid especializados en productos del país magrebí.
Entre la carga, de 1.883 kilos, había cuscús, galletas, gelatinas, vinagre, aceitunas, hojaldre, chocolate, queso fresco y diferentes salsas, entre otros alimentos.