La Federación de Asociaciones de Vecinos de Madrid ha presentado alegaciones al Plan Reside para que el Ayuntamiento prohíba las viviendas de uso turístico (VUT) en todo Madrid para afrontar la emergencia habitacional.
Tras la manifestación de este domingo por la vivienda digna, promovida por la Plataforma Hábitat, impulsada por la Federación junto a otras 38 organizaciones, la FRAVM ha destacado en un comunicado que "la situación actual es tan grave que cada vez son menos las personas y familias que pueden acceder a una vivienda digna en la capital".
La Federación ha presentado alegaciones para "prohibir la actividad de VUT en toda la ciudad, de manera que el parque residencial sea eso, exclusivamente residencial, debiendo destinar a hospedaje exclusivamente inmuebles cualificados de uso terciario".
"Con precios de compra y alquiler descontrolados en la ciudad de Madrid aconseja que la ciudad no se pueda permitir el lujo de perder ni una sola vivienda para el uso residencial", recogen las alegaciones, registradas el pasado viernes.
NO A LOS EDIFICIOS COMPLETOS
Aún aceptando "la posibilidad de utilizar edificios terciarios para su transformación en espacios de hospedaje salvando el zócalo comercial", como propone el Ayuntamiento, la FRAVM no acepta "la posibilidad de transformar mediante planes especiales el cambio de uso de residencial a hotelero por edificios completos".
La organización vecinal rechaza la zonificación propuesta por el Consistorio "por su carácter injusto pues las VUT también tienen un impacto negativo en el mercado de la vivienda de los barrios periféricos".
UNA ÚNICA ZONA
Por lo anterior, si no se prohíben los pisos turísticos en la capital, la FRAVM aboga por establecer una única zona en el municipio.
De esta manera, la Federación Vecinal hace suya la demanda de buena parte de sus asociaciones de barrio de proteger su parque residencial.
Sostienen que, de aprobarse el Plan Reside tal y como está redactado en estos momentos, "este fenómeno sin duda se disparará, desplazándose el problema del centro a los barrios y distritos exteriores a la M-30".
En esta corona, la FRAVM ha identificado un conjunto de zonas y barrios que ya sufren un notable impacto de las VUT y que requieren de restricciones inmediatas, como San Diego y Numancia (Puente de Vallecas), Puerta Bonita (Carabanchel), Ventas y Pueblo Nuevo (Ciudad Lineal), Simancas (San Blas-Canillejas), Canillas, Pinar del Rey y Valdefuentes (Hortaleza), Tetuán, Batán y Lucero (Latina).
Finalmente, la organización vuelve a llamar la atención en sus alegaciones a las "enormes carencias en materia de inspección y sanción para poder controlar las VUT ilegales".
"Si en Centro hay cerca de 8.000 VUT es porque los servicios de disciplina urbanística del Ayuntamiento de Madrid han fallado clamorosamente", han lamentado.
Por otra parte, "las órdenes de cese y clausura de la actividad se ven abocadas a un procedimiento administrativo-judicial extremadamente enrevesado, a la vez que se alarga años y años en el tiempo". "¿Por qué el Ayuntamiento de Madrid no aplica las multas previstas en el artículo 207 de la Ley del Suelo de la Comunidad de Madrid o, en su caso, las multas coercitivas establecidas en el artículo 52 de la Ley de Capitalidad?", se pregunta la FRAVM.