La Pastorela de Braojos, 600 años de tradición navideña en Nochebuena

Una de las tradiciones más curiosas y arraigadas de la Comunidad de Madrid se celebra en Braojos con la llegada de la Navidad: La Pastorela.

Es la danza de los pastores en la iglesia de la localidad para llevar el mejor cordero hasta el altar y ofrecerlo al Niño Jesús, al compás de las voces, los instrumentos tradicionales y el movimiento de los oferentes.

Nueve hombres. Ocho ordenados en dos filas abiertas, en paralelo, y uno en solitario, el 'zarragón', en el centro. Así se presentan ante el altar. La entrada en la iglesia de San Vicente Mártir, con sus cayados, morrales, vestidos a la usanza tradicional, con la música de tambor, panderetas, zambombas, carreñuelas, almirez y otros instrumentos resulta emocionante.

La Pastorela se celebra durante la Misa del Gallo, en Nochebuena. Los pastores acompañan la liturgia con sus bailes en diferentes momentos. También se suele celebrar al día siguiente con motivo de la Natividad y los días 1 y 6 de enero.

La Pastorela, cuentan en Braojos, ya se celebraba en el siglo XV, según recogen documentos. Entonces, los pastores se recogían, bajaban a pueblo y hacían esta curiosa ofrenda que seis siglos después se sigue celebrando.