Acaba junio. La ola de calor parece dar una tregua en la víspera de julio pero las temperaturas elevadas han 'evaporado' buena parte de las lluvias caídas a mediados de junio.
A pesar de la relativa intensidad de las precipitaciones, éstas no han supuesto un gran aporte ni para los pantanos ni las cabeceras de los ríos.
Los técnicos del Parque Nacional de la Sierra de Guadarrama (PNSG) lo han constatado en los ríos de este espacio protegido. En su perfil de Twitter el PNSG exponen que "a esta fecha y a pesar de las ultimas lluvias el caudal sigue muy debajo de la media histórica de junio".
En la Sierra de Guadarrama se dividen las aguas que corren hacia el Tajo (sur) y hacia el Duero (norte). Según la información del PNSG, en total existen 337 km de cursos fluviales (169 km en la vertiente sur y 168 km en la vertiente norte), de los cuales 227 km son permanentes y 109 km temporales.
Son ríos, explican, de carácter mediterráneo con caudales altamente fluctuantes a lo largo del año y en series más largas. A esto hay que añadir, destacan, la influencia de las nevadas, por lo que son principalmente ríos y arroyos de carácter pluvio-nival.
Los ríos que nacen en el Parque Nacional y recorren la Comunidad de Madrid son el Lozoya, el Guadarrama y el Manzanares. Los que corren hacia tierras segovianas son el Cega, el Pirón, el Eresma y el Moros.