La tumba de los héroes del Dos de Mayo abrirá todos los sábados de mayo y junio

La sepultura de los 43 madrileños fusilados el 2 de mayo de 1808 tras levantarse contra las tropas francesas, que se ubica en el cementerio de La Florida en Madrid, se abrirá al público este sábado 6 de mayo y podrá visitarse durante todos los sábados hasta final de junio.

El horario de apertura será desde las 10:30 a las 13:30, ha dicho a EFE José Luis Sampedro, presidente de la Sociedad Filantrópica de Milicianos Nacionales Veteranos, la cual se ocupa del cuidado y conservación de este monumento desde 1917.

"Creemos que el fusilamiento tuvo lugar en la pequeña colina donde ahora se coge el teleférico", según Sampedro para quien el cuadro de Goya "es un invento, aunque se parece", ha ironizado.

"Allí los llevan para fusilarlos en la madrugada del 3 de mayo. Allí tienen los cadáveres amontonados hasta el día 12. El 8 de mayo hay una petición del encargado de la finca de que los bajen a este cementerio que ya existía, para dedicarles unas exequias en la ermita de San Antonio", añade.

Tras ser enterrados los restos mortales el 12 de mayo, el pequeño cementerio se convirtió "en lugar de culto para los madrileños con mucha afluencia".

Los 43 fusilados suponen "en torno al 10% del número de víctimas que hubo aquella noche en Madrid, cuatrocientos y pico como mínimo, pero podrían ser 1.500 o 1.400", añade el presidente.

Este pequeño cementerio, construido en 1796 en el Parque del Oeste, se cerró al público en 1931.

Tras la Guerra Civil quedó muy deteriorado, por lo que a lo largo de los años se fue rehabilitando y la actual capilla se construyó en 1960, explica la web del Ayuntamiento de Madrid.

En 1982 se colocó a la entrada del recinto una reproducción en cerámica del célebre cuadro de Goya de los fusilamientos del 2 de Mayo, junto a un pebetero con llama, pero tras sufrir algunos actos vandálicos, se cerró de nuevo y desde entonces sólo se abría en la conmemoración del 2 de Mayo.

Un paseo arbolado con hileras de cipreses y pinos conduce a la pequeña capilla, en cuya cripta está la sepultura conjunta con los restos de todos ellos, presidida por una inscripción de mármol en la pared en la que están grabados los nombres de los 43 héroes madrileños.

La última restauración del monumento la ha realizado el arquitecto Antonio Lopera Arazola a comienzos de 2008, con motivo del bicentenario del 2 de mayo de 1808.