Las 400 ovejas del rebaño de 'Los Apisquillos' de Puebla de la Sierra ya están pastando en la Casa de Campo de Madrid. Han finalizado su trashumancia desde la Sierra Norte de la región para descansar, reponerse y parir sus corderos en el monte metropolitano.
Los animales se encargarán, con su alimentación, de retirar la vegetación que de no hacerse será combustible para un posible incendio forestal.
Por otro lado, abonarán una buena extensión de las praderas de esta zona natural de la capital.
Y aún hay más, porque en sus vellones transportan semillas que podrán germinar en la Casa de Campo ampliando la biodiversidad de este espacio.