Entrada de las ovejas por la Puerta del Rey de la Casa de Campo | LAWRENCE SUDLOW
(Actualizado

Han llegado desde Puebla de la Sierra guiadas por sus pastoras y pastores. Son las ovejas del rebaño de Los Apisquillos que regresan un año más a la Casa de Campo.

A pastar y de paso limpiar durante este otoño e invierno la vegetación que puede convertirse en combustible de cara a la época de incendios estivales.

Han sido cinco días por cañadas, cordeles, coladas, descansaderos y veredas de la región. Un patrimonio natural público estimado en unos 4.000 kilómetros.

Villaviciosa de Odón recupera la vía pecuaria que enlaza Madrid con Segovia

Las gentes de Los Apisquillos y sus animales han recorrido parte de esos caminos, a veces no expeditos, desde la Sierra Norte hasta el monte metropolitano.

Julia, mayorala de Los Apisquillos, conduce las ovejas por la calle Arroyofresno camino de la Casa de Campo | LAWRENCE SUDLOW

Aquí engordará su ganado y serán paridos los corderos, en una instalación preparada en la Casa de Campo con agua cercana en un abrevadero y suficientemente alejada del tráfico de paseantes.

500 ovejas pastan en la Autónoma en un proyecto de ganadería extensiva

Las 300 ovejas 'rubias de El Molar' y 'negras castellanas' son ejemplo de ganadería intensiva, sostenible, generadoras de riqueza en zonas rurales y de otros beneficios que se extienden incluso a las urbes. No sólo como prevenir incendios o servir de reclamo turístico y oportunidad educativa.

También han traído desde sus campos serranos, pegados en sus vellones, semillas y esporas que diseminarán en la Casa de Campo incrementando la biodiversidad de esta zona natural.