La Comunidad de Madrid ha activado este viernes por tercera vez en lo que va de temporada la Alerta 2 o Alto Riesgo por calor ante la subida paulatina de la temperatura durante los próximos días, con una previsión para el lunes 1 de agosto de 38,2 grados.
Esta medida se enmarca dentro del Plan de Vigilancia y Control de los Efectos de las Olas de Calor sobre la Salud, cuyo principal objetivo es reducir al máximo las consecuencias de las altas temperaturas en la salud de la población más vulnerable, como las personas mayores, la población infantil y los enfermos crónicos, detalla el Gobierno madrileño en un comunicado.
Desde el 1 de junio, periodo de inicio del Plan, hasta este viernes 29 de julio, la Alerta 2 o Alto Riesgo (roja) se ha activado en tres ocasiones, el 10 de junio, 7 de julio y en la jornada de este viernes. Hasta el momento se han contabilizado 30 días en máximo riesgo.
Se trata del verano con mayor riesgo para la salud de los 19 años de vigencia del Plan y el mayor número de días en alerta roja se había experimentado, hasta la fecha, en 2015 con 28 de alto riesgo.
Además, los sanitarios destacan que es la primera vez, a falta de más de un mes y medio para que finalice el periodo de vigencia del Plan, que se han registrado más días con temperaturas tan altas y mantenidas durante jornadas consecutivas.
Concretamente, en junio se contabilizaron 5 seguidos por encima de los 38,5 grados y en julio han sido 9 consecutivos. Especialmente calurosos fueron las jornadas entre el 13 y el 17 de julio, en los que las máximas marcadas consecutivamente llegaron a alcanzar y superar los 40 grados.
La temperatura máxima prevista para este viernes es de 36,8 con un pronóstico de ascenso a lo largo del fin de semana que se plasma en 37 grados el domingo, hasta superar los 38 el lunes, según recoge el Boletín de Información Olas de Calor que elabora la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad.
Sanidad señala la importancia de mantener una hidratación adecuada mediante la ingesta de abundantes líquidos y el consumo de alimentos ricos en agua como fruta, ensaladas, gazpacho, etcétera. Las personas mayores deben beber al menos dos litros de agua al día, incluso sin tener sed.
Hay que evitar la exposición solar así como realizar ejercicio físico en las horas centrales del día, procurando llevar prendas de tejidos naturales, ligeros y de colores claros así como cubrirse la cabeza.
Los expertos insisten en que nunca se deje a una persona en un vehículo expuesto al sol ni tampoco a las mascotas pues en el interior del coche puede alcanzarse temperaturas altísimas, y que los ciudadanos estén pendientes de familiares, vecinos y personas vulnerables, especialmente si viven solas.
Además, recomienda que, en caso de que se esté tomando algún medicamento de manera habitual, se consulte con el médico o farmacéutico por si fuera necesario ajustar las dosis. Ante emergencias causadas por las altas temperaturas, se recuerda que hay que contactar con el 112.
También hay que recordar que es importante aplicarse protector solar y evitar la exposición al sol especialmente en el caso de los niños y población vulnerable. También hay que prestar atención a las mascotas.