Madrid unirá zonas verdes y recuperará otras degradadas para crear el Bosque Metropolitano

Cinco proyectos sobre cinco partes de Madrid que ya contienen, en su mayoría, espacios naturales, zonas verdes u otras susceptibles de ser naturalizadas. En total 75 kilómetros de corredor uniendo puntos de la periferia más degradada con los principales bosques, montes, y pastizales del entorno urbano. E incluso conectando con otros espacios naturales de municipios limítrofes.

En diciembre de 2020 ya se dieron a conocer los ganadores del concurso internacional de ideas del Bosque Metropolitano promovido por el Ayuntamiento de Madrid. Y este viernes el delegado de Desarrollo Urbano, Mariano Fuentes, y la vicealcaldesa, Begoña Villacís, han acompañado a los cinco autores que han presentado oficialmente sus trabajos.

El Bosque Metropolitano, con una inversión de más de 70 millones de euros, prevé la plantación de 450.000 árboles para tratar de compensar parte de las emisiones de gases contaminantes y frenar la desertización que afecta más al sur de la capital.

Unir los montes

Es el proyecto de Pino Forestal para la corona noroeste que discurre, en parte, entre montes naturales. El objetivo es la conexión de los montes de El Pardo, Valdelatas y la Casa de Campo. Utiliza en parte la plataforma del Anillo Ciclista y el camino que une Madrid y Manzanares el Real a través el Puente de San Fernando.

Prevé crear en Fuencarral un centro de interpretación ornitológico y entre Aravaca y la Casa de Campo varias instalaciones deportivas con una zona de restaurantes y un minigolf.

Parques urbanos

La finalidad de este lote de la corona noreste es lograr la conectividad ambiental del conjunto de parques urbanos y dotaciones presentes en este entorno: arroyo y parque de Valdebebas, recintos feriales, Nueva Centralidad del Este, parque de la Cuña Verde de O’Donnell y cerro Almodóvar.

Todo ello a través, según Luis Climent, creador de la idea, de una gran avenida forestal de 24 kilómetros de longitud que conecte los parques existentes. Esta avenida tendrá carril ciclista y peatonal segregados y contará con establecimientos de restauración, aseos y otros equipamientos.

El anillo verde del sureste

El proyecto de David Gistau Cosculluela trata de poner en valor los espacios libres de los desarrollos urbanísticos de Los Cerros, El Cañaveral, Los Ahijones, Los Berrocales, el Ensanche de Vallecas y Valdecarros, conectando el cerro de la Herradura con la zona de los Cantiles del Manzanares.

Este trabajo contempla la plantación de diversas especies arbóreas en el entorno de la Planta de Valdemingómez para mitigar los malos olores procedentes de esta instalación. La recuperación de algunos caminos permitirá salvar la M45 y conectar con San Fernando de Henares y Coslada.

Los parques fluviales del sur

El propósito en el arco sur es conseguir las conexiones de los sistemas fluviales del río Manzanares y arroyo de la Gavia, así como la integración de los espacios libres en Entrevías, La Atalayuela, Mercamadrid y Butarque.

El estudio Aldayjover articula su intervención en torno al agua no sólo de los ríos y arroyos, sino también el de las tres depuradoras del sur de las que pretenden obtener mayor cantidad de aguas regeneradas.

Pretenden transformar parte del paisaje de vertidos en un terreno más forestal y agrícola, actividad que siempre ha estado unida a esta parte del territorio.

El anillo metropolitano

Se propone para el suroeste la integración del sistema metropolitano que forma la capital con Getafe, Leganés y Alcorcón, con la Casa de Campo, poniendo en valor los entornos fluviales de arroyo Meaques y su Entorno ya en proceso de recuperación por parte de los vecinos y la Comunidad.

El estudio Rubio Arquitectura contempla un parque agrario en Cuatro Vientos, la recuperación forestal del espacio comprendido entre la A5 y la M40 y la M511 y convertir la antigua siderurgia de Villaverde en el centro de gestión del Bosque Metropolitano de Madrid.