El restaurante de gastronomía italiana que sufrió un incendio en el que murieron dos personas en la noche del viernes en la madrileña plaza de Manuel Becerra cuenta con licencia para actividad de hostelería que incluye cocina y elementos para cocinar, aseguran fuentes municipales.
Se refieren a un pantallazo que circula en redes sociales en el que se describe la actividad del local como “bar sin cocina”, una catalogación que, según las mismas fuentes, no indica que el establecimiento no tenga licencia para cocinar.
Detallan que el epígrafe ‘bar sin cocina’ corresponde a la descripción que realiza el censo de locales, una cuestión que “no tiene nada que ver con la licencia ni con urbanismo”, y dicen que “puede ser un error en el epígrafe”.
El Ayuntamiento de Madrid está investigando el estado de la licencia del restaurante para determinar “si Adiós, Palomase cumplieron o no las prescripciones que contiene" la misma, explicó desde el lugar de los hechos el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida.
La noche del viernes se convirtió en una tragedia para los comensales del restaurante Burro Canaglia Bar & Resto, cuando alrededor de las 23:00 horas ardió el local, de pequeñas dimensiones y con cerca de 30 personas en su interior, por una llama que llegó al techo del establecimiento tras flambear un plato uno de los camareros.
El fuego se propagó con gran celeridad por la decoración de plástico de vegetación artificial del techo y las paredes del interior, y comensales y empleados quedaron encerrados en su interior, cobrándose dos víctimas: una clienta y un camarero.
La Policía Nacional investiga el trágico suceso, que causó doce heridos, de los cuales ocho permanecen ingresados en distintos hospitales de la región, cuatro de ellos en la UCI, tres en unidades de grandes quemados con quemaduras de entre el 8 y 25 % de su cuerpo, y otro en cuidados intermedios