El Ayuntamiento de Madrid, a través del área de Medio Ambiente y Movilidad, ha autorizado a seis empresas el despliegue de 2.802 bicicletas eléctricas sin base fija, según han informado fuentes del área que dirige Borja Carabante.
Así, notificó este martes a las entidades interesadas en esta actividad la resolución para comenzar la distribución de su flota por la ciudad una vez que hayan presentado la póliza y el seguro de responsabilidad civil para el funcionamiento del arrendamiento de sus vehículos.
El Consistorio publicó por primera vez en junio de 2020 la resolución para la concesión de estas autorizaciones demaniales gratuitas y temporales que permiten contribuir a impulsar la movilidad sostenible con el aterrizaje de hasta 4.800 bicicletas eléctricas sin base fija en la capital.
Seis operadores han solicitado el permiso para poder operar: BiciMAD Go (EMT) e Idbrik Spain (Ridemovi), que repiten respecto a hace dos años, y se suman por primera vez Bird, Boltest, Ride Dott y Lime.
Atendiendo a las diferentes necesidades de los operadores y teniendo en cuenta los criterios establecidos en la resolución publicada, la Dirección General de Gestión y Vigilancia de la Circulación, dependiente de Medio Ambiente y Movilidad, ha llevado a cabo una distribución porcentual en función de los requerimientos hasta alcanzar el límite de 1.999 bicis dentro de la M-30.
En el exterior se mantienen las cifras solicitadas y quedarían disponibles autorizaciones para el despliegue de otras 1.197 bicis fuera de la vía de circunvalación.
Una vez ajustada la demanda de las autorizaciones BiciMAD Go cuenta con 88 bicicletas dentro de la M-30 y 200 en el exterior (como mantenían en la actualidad); Idribk Spain (Ridemovi) con 348 dentro de la M-30; Bird con 243 en el interior y 300 en el exterior; Boltest con 695 en el interior y 303 en el exterior; Ride Dott con 104 en el interior y Lime con 521 en el interior.
La determinación del límite máximo inicial de bicicletas autorizadas para empresas se ha basado en la Ordenanza de Movilidad Sostenible (OMS), que establece que las bicicletas y vehículos de movilidad urbana (VMU) ligados a una actividad de explotación económica no podrán ocupar más del 50% de las plazas existentes en una reserva de estacionamiento. En concreto, Madrid dispone de un total de 9.600 plazas.
De esta forma, desde el área de Medio Ambiente y Movilidad han señalado que esta cuantía inicial autorizable "garantiza la seguridad vial y asegura el libre mercado y la libre competencia efectiva".
Además, se podrá incrementar o disminuir en función de la demanda y el uso real de los vehículos. De acuerdo con esta posibilidad, los autorizados deberán facilitar al Ayuntamiento información en tiempo real (a través de conectores automáticos, servicios web o similares) sobre la geolocalización de los vehículos, así como el acceso al cuadro de mando que permita evaluar el uso medio de las bicicletas y su actualización.