El Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid ha modelizado un anteproyecto de soterramiento del Puente de Vallecas redactado en 2006 y ha comprobado que no es viable para lograr una movilidad sostenible bajo los criterios de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360.
Desde el Área de Medio Ambiente y Movilidad que dirige Borja Carabante señalan que, tal y como se configuró hace 16 años (soterramiento de 500 metros), ahora no evitaría la circulación de un gran volumen de vehículos en superficie, ya que es el principal acceso de la M-30 a los distritos de Retiro (120.000 habitantes) y Puente de Vallecas (240.000 habitantes), que entre ambos reúnen más habitantes que la ciudad de Bilbao.
Además, se ha concluido que un 25% de los 15.000 vehículos que circulan en hora punta lo seguirían haciendo en superficie para poder acceder a los viales de distribución de estos dos distritos.
Así, este tráfico obligaría a que el vial de superficie necesite, de forma general, tres carriles de circulación por sentido, pues "si se reducen a dos se generaría congestión y más contaminación" y este trazado "no permitiría ganar espacio para los vecinos en superficie".
De este modo, el Consistorio madrileño va a realizar un estudio de alternativas en la zona para ejecutar una solución "viable y sostenible".
Por último, desde el Gobierno municipal mantienen el compromiso de trabajar para la eliminación del puente, donde en el presupuesto municipal de 2022 se ha reservado un crédito de 1,55 millones de euros para la redacción del nuevo proyecto.
Por último, remarcan que "la envergadura técnica y económica de una obra como esta necesita una buena planificación".
Malestar de los vecinos
Ante estas novedades, la FRAVM y las asociaciones vecinales de Puente de Vallecas y Retiro han denunciado el injustificado retraso en la presentación del estudio preliminar.
"Una demora cuya única responsabilidad recae en el Área de Medio Ambiente y Movilidad, que no está haciendo más que retrasar un proyecto que representa una demanda vecinal histórica, especialmente para los vecinos y vecinas de Vallecas", afirman desde el movimiento vecinal.
Las asociaciones vecinales han recordado que el compromiso del Ayuntamiento es ganar espacio público especialmente para dos de los barrios más colmatados de la ciudad de Madrid, como son Numancia y San Diego.
"Un espacio público que pueda dotar al vecindario de estos barrios de nuevas zonas verdes y dotacionales, y acabe con una de las mayores brechas urbanas que se mantienen en nuestra ciudad", aseguran.