El número de nuevas sociedades mercantiles en la Comunidad de Madrid creció un 17,3% en julio en tasa anual, 7,6 puntos más que la media nacional, con 2.059 nuevas empresas constituidas, por delante de Cataluña (1.642) y Andalucía (1.320), según los datos difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Para las empresas constituidas en julio en la región, se suscribió un capital de 88,36 millones de euros y se desembolsaron 85,189 millones de euros.
La mayoría de las empresas creadas en la región fueron sociedades limitadas, con un total de 2.038, a las que se suman 21 sociedades anónimas. Además, 578 empresas ampliaron capital en junio por valor de 2.162 millones de euros.
Por contra, las empresas disueltas en la región madrileña fueron 491 en junio, lo que supone un 9,1% menos que hace un año. Atendiendo a las empresas disueltas, la Comunidad de Madrid fue la que presenta mayor número seguida de Andalucía (213) y Cataluña (129).
Datos a nivel nacional
El número de nuevas sociedades mercantiles aumentó un 9,7% en julio en relación al mismo mes de 2020, hasta totalizar 8.379 nuevas empresas, la cifra más alta en un mes de julio desde 2007, según los datos difundidos este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Con el avance interanual de julio, la creación de empresas encadena seis meses consecutivos de tasas positivas después de haber aumentado un 3,1% en febrero, un 61,8% en marzo, casi un 300% en abril, un 152,4% en mayo, un 41,8% en junio y un 9,7% en julio.
De este modo, el crecimiento interanual de julio ha sido el más moderado desde el pasado mes de febrero, lo que no ha impedido que el número total de nuevas sociedades sea el más alto en un mes de julio desde hace 14 años.
De acuerdo con los datos del INE, el número de sociedades mercantiles disueltas el pasado mes de julio fue de 1.503, un 4,7% más que en el mismo mes de 2020. De esta forma, una media de 48 empresas cerraron sus puertas cada día del mes de julio.
En tasa mensual (julio sobre junio), la constitución de empresas bajó un 12,3%, mientras que las disoluciones empresariales disminuyeron un 4,3%. En ambos casos se trata de los mayores retrocesos en al menos cinco años.