La capital atesora algunos de los edificios, calles y plazas más grandes de toda España y también algunos de los lugares más pequeños
Son menos conocidos, pero a pesar de sus reducidas dimensiones tienen una gran historia detrás
P.O.
Madrid es una ciudad grande, una de las mayores de España. También es la más poblada, la que tiene algunos de los edificios más altos, las avenidas más amplias y largas, la que tiene el túnel urbano más grande...Y así podríamos seguir la enumeración de un Madrid gigante.
Pero también hay un Madrid pequeño, a veces muy pequeño, que merece atención por el hecho de estar no sólo en el polo opuesto de las grandes dimensiones, sino porque son lugares a veces poco conocidos y con una enorme historia. O al menos con un encanto especial, precisamente por su carácter recoleto.
Vamos con algunos de estos lugares de Madrid...
La calle más pequeña es la de Rompelanzas, tiene apenas 25 metros de largo. Es la prolongación de la calle Maestro Victoria y une las de Preciados y Carmen, muy cerca de la Puerta del Sol.
Se abrió como paso de carruajes debido a que el codo que existía obligaba a un giro de las carrozas que a veces rompía la 'lanza', el mástil que une el tiro de animales con el coche. Si alguno sigue sin ubicarse, basta decir que justo al final o principio de esta calle está la administración de Lotería de Doña Manolita.
La plaza más pequeña de la ciudad ni siquiera es plaza sino plazuela, la Plazuela de San Javier, con apenas 160 metros cuadrados de superficie. Prácticamente escondida en mitad de la calle del Conde, en pleno casco histórico de Madrid.
Casas pequeñas y muy pequeñas
En cuanto a la casa más pequeña, tenemos una dura competición aunque con una clara ganadora. El edificio de la calle Mayor 61, en el que se dice que habitó don Pedro Calderón de la Barca, tiene 5 metros de ancho de fachada. Muchos se asombran y no pasan de aquí.
Pero unos pasos atrás, en la misma calle Mayor, en el número 57 se levanta otro inmueble de 3,5 metros de ancho. Pero tampoco es esta la ganadora, porque en la calle de Postas número 6 encontramos a nuestra vencedora con sólo 3,12 metros. Esta casa, ahora tienda de artículos religiosos, es citada en la obra de Benito Pérez Galdós 'Fortunata y Jacinta'.
Tendríamos otra posible ganadora aún más pequeña, pero no ha llegado hasta nuestros días porque se demolió en el siglo XIX. Se trata de la conocida como 'la casa de las 5 tejas' que estaba en la calle de Santa Ana. Cuentan que en su tejado sólo cabían 5 tejas. Si tenemos en cuenta que la tradicional teja árabe de barro tiene poco más de 20 centímetros en su parte más ancha, echad cuentas de las dimensiones de este edificio.
Parques y cementerios
Sobre cuál es el parque o jardín público más pequeño, no hay duda: el Huerto de las Monjas, en la calle Sacramento 7. Otros lo conocerán como el Jardín del Palacio O'Reilly. Tiene poco más de 190 metros cuadrados. Antes de abrirse al público en los años 70 era la zona cultivo de las Bernardas, las monjas de clausura que le dieron nombre a este espacio.
Desde que apareció la herramienta de medir de Google Maps se acabaron muchos de los récords de 'lo más pequeño de...'. Esto ha pasado con el cementerio más pequeño de Madrid. Siempre se ha sostenido que es el de La Florida, construido en recuerdo de los madrileños fusilados por los franceses en mayo de 1808.
Sin embargo, el realmente más pequeño de toda la ciudad es el de los empleados de Duques de Osuna, justo al lado del castillo de Barajas (368 m2). El de La Florida es mucho mayor, ocupa más de 4.800 metros cuadrados.
El pequeñísimo comercio
Hay un gran comercio, luego está el pequeño comercio y también encontramos en Madrid diminutos comercios. Ya vimos que la tienda de artículos religiosos de la calle Postas 6 era realmente estrecha, aunque luego ocupe un edificio en altura. La tienda más pequeña de Madrid, ahora mismo podría ser alguna de las que ofrecen souvenirs en el casco antiguo, pero la más pequeña de todas cerró en 2019.
Era la Cordoneria Fillola, abierta desde 1921 sobre sus 2 metros cuadrados en el interior del portal del edificio de la calle de la Sal número 1. El edificio está actualmente desocupado pero se puede ver todavía el pequeño escaparate.
El mundo de la hostelería tampoco se libra de la reducción. El restaurante más pequeño de la capital tiene sólo una mesa, cuatro sillas o más (dependiendo de las restricciones Covid) y un suelo cubierto de sal...del Himalaya. Su especialidad es la comida tailandesa y está en la calle Eguilaz de Chamberí. Su nombre: Diamantes de Sal Rosa.