Seis cofradías y hermandades han salido en procesión, entre ellas la de Jesús Nazareno de Medinaceli, la del Santísimo Cristo de los Alabarderos o la de El silencio, para recorrer al anochecer las calles de Madrid, en una jornada de viernes santo en la que finalmente el tiempo fue clemente y despejó mediada la tarde.
El Cristo de Medinaceli, "Señor de Madrid", por primera vez en su historia vestido con túnica blanca, ha sido hoy el principal foco de atracción de las seis procesiones que recorren el centro de la capital y que han congregado a miles de fieles y turistas.
De la Basílica del Cristo de Medinaceli de los Padres Capuchinos ha salido a las 19.00 horas la procesión de Nuestro Padre Jesús el Nazareno, el Cristo de Medinaceli, una talla anónima sevillana de finales del siglo XVII.
Catorce portadores y una guía han dirigido el trono sobre ruedas del Señor de Madrid, al que varios fieles han dedicado saetas a su salida del templo y también durante el recorrido.
El Nazareno no ha lucido este Viernes Santo su túnica tradicional de color morado, como corresponde a esta imagen, sino una blanca, por el guiño que los cofrades han hecho a la celebración en 2016 del año de la Misericordia.
Detrás de esa imagen, en la misma procesión, circulaba la talla de Nuestra Señora de los Dolores en su Mayor Soledad, obra de Rafael García de Iruzoqui de 1948.
Al son de los pífanos y los tambores ha iniciado su recorrido a las 19.00 horas el Santísimo Cristo de los Alabarderos desde la Puerta del Príncipe del Palacio Real a lomos de 44 anderos, en la única procesión castrense de la capital.
En ella se ha podido ver a la infanta doña Elena, hermana mayor honorífica de la congregación, que ha dado la orden de una levantada del paso.
A las 20.00 horas, la imagen del Santísimo Cristo de la Fe, obra de José Capuz Mamano, ha echado a andar desde la iglesia homónima hacia las calles del histórico barrio de las Letras, donde hace una parada frente al convento de las Trinitarias.
También desde la calle Atocha han salido en procesión a lo largo de la tarde tres cofradías distintas, la primera de ellas la del Divino Cautivo, con la imagen de Nuestro Padre Jesús del Divino Cautivo esculpida en 1944 por Mariano Benlliure, seguida de María Santísima de los Siete Dolores, de Faustino Sanz Herranz.
Así como la Procesión del Santo Entierro, con las tallas del Santísimo Cristo de la Vida Eterna, de Jacinto Higueras, fechada en 1941, y María Santísima de la Paz, de los talleres de Agustín López Miraz.
Las procesiones continúan por las calles del centro de Madrid hasta la medianoche en este Viernes Santo, mientras que mañana, a las 16.30 horas, les tomará el relevo la Procesión de la Soledad.
SALIDA DEL CRISTO DE LOS ALABARDEROS, LA PROCESIÓN MÁS CASTRENSE
Para muchos madrileños el viernes santo es "el alfa y el omega, el día de mayor devoción" de la Semana Santa.
La procesión de Jesús Nazareno de Medinaceli salió alrededor de las 19:00 horas de la basílica de Jesús de Medinaceli, en la Plaza de Jesús, 2; el Santísimo Cristo de la Fe (19:00 horas), desde la iglesia del Santísimo Cristo de la Fe (calle Atocha, 87), o el Santísimo Cristo de los Alabarderos o de la Fe, también a las 19:00 horas desde la puerta del príncipe del Palacio Real.
UNA 'LEVANTÁ DEDICADA A LOS TRABAJADORES DE TELEMADRID
La procesión de Nuestro Padre Jesús el Divino Cautivo saldrá a las 19:00 de la Iglesia de Santa Cruz, en la calle Atocha, 6; la misma iglesia de la que salía media hora más tarde María Santísima de los Siete Dolores, y a las 20:30 también de la iglesia de Santa Cruz partirá el Santo Entierro, con las imágenes del Santísimo Cristo de la Vida Eterna y de María Santísima de la Paz.
En Villaverde Alto, desde la parroquia de San Andrés (Calle Oxigeno 15), salieron el Cristo de la Misericordia, el Santo Entierro y la Virgen de la Soledad, y una hora más tarde, desde la parroquia de san Sebastián Martir, salía la procesión de El Silencio.
En La parroquia de Santa Cristina, del Paseo de Extremadura, tuvo su protagonismo el Señor de los Milagros; en Barajas, el Santísimo Cristo de la Expiración y Nuestra Señora de la Soledad, desde la parroquia de san Pedro Apóstol, y en Fuencarral el Cristo de la Cruz a Cuestas, desde la parroquia de San Miguel Arcángel.