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La portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Rita Maestre, ha aseguradoque cuando la presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, era delegada del Gobierno las protestas se encararon "con una mano dura" de la que, a su juicio, la popular "ha hecho siempre gala".

"Cuando era delegada era una época en la que había muchas protestas y manifestaciones y en la calle había mucha indignación social y esas protestas en la ciudad de Madrid a menudo se han encarado desde la Delegación de Gobierno con una mano dura de la que Cifuentes ha hecho siempre gala", ha afirmado Maestre en una entrevista en Telemadrid preguntada por las palabras de Cifuentes, quien ha avanzado que iniciará acciones legales contra ella si no se disculpa tras sus declaraciones en las que sostenía que su "actuación como delegada del Gobierno era pegar a gente".

Maestre ha explicado que ese modo de actuar implicaba que la Policía "ha pegado a la gente durante un tiempo para tratar de contener las protestas" y ha señalado que "eso está claro como que hay cuatro condenas contra la Delegación de Gobierno como consecuencia de sus actuaciones en las protestas de Madrid".

En esta línea, preguntada por la decisión de Cifuentes de ir a los tribunales, ha considerado que "si quiere empezar con un intercambio de titulares grandilocuente o con esta cosa de judicializar la política es un poco innecesario".

ESCRACHES DIFERENTES

La portavoz municipal ha considerado que el escrache sufrido por Cifuentes en el verano de 2012 es diferente al que sufrió a inicios de año el concejal de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, cuando le increpó un grupo de policías tras salir de la Casa de la Villa.

Maestre ha defendido que son diferentes, y ha visto tres diferencias fundamentales. La primera, el contexto de crisis que en 2012 era "distinto" y el clima de indignación social "era distinto" que el actual.

En segundo lugar, ha considerado que en ese momento "no existían cauces de diálogo con el gobierno del PP y la Delegación que presidía Cristina Cifuentes". No existía, ha aseverado, la posibilidad de dirigirse a ella, ni entablar una conversación con ella en la que se intercambiaran demandas, algo que, a su juicio, sí existe con Barbero.

En tercer lugar, ha opinado que "no es lo mismo una reivindicación política que una demanda sindical laboral", que, en su opinión, sigue unos "cauces distintos". No obstante, Maestre "evidentemente no" ha justificado el escrache del que fue víctima Cifuentes. "*Quién va a justificar eso?", se ha preguntado y ha considerado que las imágenes "son muy desagradables" y lo lamenta "de corazón".