Sanse anuncia "sanciones ejemplarizantes para quienes destrozan las fachadas de viviendas y comercios". La localidad considera "un problema de primer orden" la proliferación de pintadas en paredes y muros públicos y particulares, tanto de viviendas como de comercios.
“Hacer un grafiti es un acto vandálico muy grave y pintar las paredes de todos los vecinos perjudicando el patrimonio de todos no puede salir prácticamente gratis. Hay que acabar con el vandalismo y evitar que se sigan produciendo pintadas. Estamos trabajando para que la ordenanza sea modificada cuanto antes”, ha asegurado la alcaldesa, Lucía S. Fernández.
Por otra parte, el equipo de Gobierno está elaborando un plan de limpieza de grafitis que se va a ejecutar en las próximas semanas, que recoge áreas urbanas y áreas industriales.
Afirma el ayuntamiento que el contrato de limpieza de grafitis en vigor, heredado del anterior mandato, sólo se ha ejecutado en un 23,52%. Según el equipo de gobierno local, el objetivo prioritario es atender las múltiples solicitudes de limpieza de familias y comerciantes "que hasta ahora no habían sido atendidas", y abarcar el mayor número de fachadas en todos los barrios.