Los alcaldes de Morata de Tajuña y Chinchón, Ángel Sánchez y Javier Martínez, se han reunido con la delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, para pedirle "refuerzos" ante la situación de “inseguridad” que, a su juicio, se está produciendo en la vega del Tajuña a raíz de la “proliferación” de asentamientos ilegales.
Los alcaldes mantuvieron la tarde del martes una reunión telemática con la nueva delegada del Gobierno en Madrid, poniendo el acento en este problema ante el que los Ayuntamientos “están muy limitados”, tanto en materia de seguridad como de competencias urbanísticas, precisan en un comunicado.
Los dos ediles aseguran que González ha mostrado su “total colaboración” con ambos Consistorios y se ha comprometido a iniciar una “estrategia común” entre las administraciones para “resolver este problema”.
Los alcaldes aseveran que “lo que más les preocupa” es que la eliminación de estos asentamientos ilegales crecientes “es muy farragosa” para una administración local, aunque, no obstante, ya se han iniciado algunos derribos en el término de Chinchón.
Sánchez y Martínez recuerdan que “toda la vega es suelo no urbanizable y completamente protegido”, lo que ha permitido a ambos Ayuntamientos iniciar una “gran cantidad” de expedientes de infracción urbanística, para evitar que estas construcciones ilegales se conviertan en residencias.
Sin embargo, desde ambas localidades piden ayuda a Delegación para luchar contra un problema que “está perjudicando medioambientalmente” a la vega del Tajuña y que “provoca situaciones de inseguridad entre los vecinos y agricultores”, cuya actividad, aseguran, se está viendo afectada por las “construcciones ilegales”.
