El Consorcio Regional de Transporte de Madrid (CRTM) ha aprobado reforzar el servicio la única línea regular de autobuses 336 que une Morata de Tajuña con la ciudad de Madrid, ampliando su ruta a los fines de semana y añadiendo más paradas, para consolidarla como “el principal medio de transporte público para la mayoría de los morateños”.
En concreto, la línea contará con ocho nuevas paradas en el municipio, principalmente en las zonas norte y este, cuyos vecinos hasta ahora tenían que acudir al centro para tomar esta prestación.
A eso se suma que habitualmente los autobuses que van de Morata de Madrid habían pasado antes por Chinchón y “están llenos” cando llegan a Morata, de forma que sus vecinos no podían subir.
Sin embargo, la línea 336 que se va a ampliar tiene la cabecera en Morata, por lo que iniciarán vacíos su recorrido y los vecinos no se quedarán en tierra, explican desde el Consistorio en una nota.
El alcalde de Morata de Tajuña, Fernando Villalaín, considera que esta medida es “muy buena y necesaria”, y que dará respuesta a “una de las principales demandas de los morateños”, que en muchos casos se veían obligados a tomar el coche para llegar a la capital.
Además, el alcalde señala que ya están trabajando para conseguir nuevas mejoras en movilidad, especialmente para convertir la actual L1 en la línea 330A, que pasará a unir Morata con Perales de Tajuña “con más frecuencias y paradas”; además de incrementar también las frecuencias de la Línea 330 que une el pueblo con el Hospital Universitario del Sureste.